La Gimnástica Segoviana y el Recreativo de Huelva recorren caminos inversos. El consejo de administración del club onubense -que es sociedad anónima deportiva desde 1999- será elegido y controlado por sus aficionados en 2025 después de haber estado al borde de la desaparición y de que el Ayuntamiento de Huelva se haya convertido en su accionista mayoritario para salvarlo. La Segoviana se encuentra en pleno proceso de transformación en SAD y en principio solo venderá acciones a sus seguidores aunque el objetivo final parece parece puesto en la entrada de inversores privados.

Estas dos caras de la misma moneda se cruzan ahora en el terreno de juego y también con diferentes recorridos. Mientras que la Segoviana se presenta como el aspirante -es la primera vez que opta a ascender a Primera RFEF-, el Recreativo esgrime su condición de decano del fútbol español y su enorme respaldo social (tiene más de 10.000 socios). Ambos equipos lucharán por una plaza en la final del 'play off'.

El primer envite es este domingo (18.00 horas) en La Albuera, donde se espera un lleno y la presencia de 360 aficionados onubenses. Para protegerse de una posible 'invasión', el club gimnástico ha centralizado la venta de entradas en su sede y los seguidores tienen que presentar el DNI. Al Recreativo solo ha enviado esas 360, que se agotaron en unos minutos después de que algunos aficionados hicieran incluso noche para conseguirlas.

El aspirante desafía al favorito

«Es un club muy grande que tiene mucha repercusión», destaca Fernando Llorente, que jugó en el Recreativo en la temporada 2018/2019 y que ahora es la referencia de la Segoviana. «Tengo un recuerdo precioso de cuando estuve. Nada más salir el sorteo estuve hablando con gente de allí. Que si es el destino, que vaya casualidad... Estoy muy contento de que nos haya tocado el Recre. Para nosotros también va a ser bonito ir a un campo en el que la gente aprieta».

Llorente da como favorito al Recreativo, pero reclama personalidad a su equipo. «Somos conscientes de la dificultad del reto. El Recreativo es un equipo muy favorito para ascender pero cuanto más grande es el reto más bonito es. También somos conscientes de que su principal objetivo era el ascenso y no lo han conseguido como primeros, así que tienen una necesidad de subir bastante palpable. Nosotros estamos bastante satisfechos todos de la temporada que hemos hecho, pero vamos a por más. Queremos disfrutarlo pero también ser ambiciosos», remarca.

Las lesiones se han convertido en uno de los principales obstáculos de la Segoviana en este tramo final de la temporada. Javi Borrego está descartado y Acuña tiene muy difícil llegar al partido de vuelta de esta eliminatoria. «Pero las bajas no van a condicionar que no pasemos», asegura el entrenador, Ramsés Gil, quien destaca el buen momento del equipo.  «Los datos que nos dan los GPS en entrenamientos y partidos son salvajes. Hay un desgaste, porque son diez meses de trabajo y la exigencia que se ha mantenido es muy alta, pero la forma física a nivel de competición es buenísima. Las lesiones son inevitables, pero el estado de forma para mantener un equilibrio todo el año lo de nuestro preparador físico, Nacho [Gonzalo], es una barbaridad. Es un fenómeno».

La Segoviana buscará un buen resultado en La Albuera para acudir con más opciones al partido de vuelta, que se disputará el próximo domingo a las 20.00 horas. En caso de empate al final de los dos encuentros habrá prórroga. Y si continúa pasará el Recreativo por su mejor clasificación durante la temporada regular. No se lanzarán penaltis. «Prefiero mil veces el primer partido en casa, sobre todo después de que se haya quitado el valor doble de los goles en campo contrario», apunta Ramsés, quien no cree que la Segoviana empiece con ventaja por el peso de la historia que soporta el Recreativo. «Que ellos tengan la presión no nos beneficia ni nos perjudica. A mi la presión no me parece mala. Me gusta tener ese gusanillo y a los buenos futbolistas también», resalta. El Recreativo también apela a la precaución. «Nos van a poner las cosas muy difíciles», ha advertido su entrenador, Abel Gómez.