«Si se cierra se muere». Así de tajante se muestra Miguel María Manso, propietario de una zapatería, sobre la peatonalización de la calle de Blanca de Silos y su repercusión en comercios y negocios. La plaza de Santa Eulalia ha sido escenario esta semana de la presentación de una plataforma ciudadana que nace "para frenar los planes e imposición» del actual equipo de gobierno en el Ayuntamiento de Segovia de convertir esta arteria comercial del barrio en un bulevar peatonal.
En este sentido, la plataforma está integrada por vecinos de Santa Eulalia, entre ellos residentes de esta céntrica vía, pero también de otras adyacentes, así como comerciantes de la calle y de zonas cercanas y cuenta con el apoyo de la asociación de vecinos . Durante la presentación, a la que asistió una veintena de personas, otra comerciante, Pilar, explicó que nace fruto de la opinión mayoritaria contraria a la peatonalización, a tenor de lo que residentes y propietarios de negocios han transmitido desde que se dio a conocer este proyecto municipal del PP.
Zona de ocio universitaria La presidenta de la asociación de vecinos, Esther Santos, dio lectura a un manifiesto consensuado por comerciantes y residentes que indica que el bulevar proyectado es una imposición que se lleva a cabo «sin consenso alguno» y llama la atención sobre lo que sus promotores consideran inconvenientes como el incremento del tráfico de vehículos en calles adyacentes «sin un estudio de movilidad previo» o el riesgo de convertir Blanca de Silos «en una Calle de los Bares II», una nueva zona de ocio para estudiantes universitarios, «en detrimento de la salud y el derecho al descanso de los vecinos, desplazando a la población del barrio y generando el estrangulamiento del pequeño comercio de la zona».
Santos ha informado de la reciente apertura de una residencia universitaria en el barrio y la previsión a corto plazo de creación de alojamientos similares. Sostiene, además, que la asociación recibe quejas de vecinos por «juergas en pisos de estudiantes», aunque, por lo visto, no en todos los casos, ya que una de las residentes comentó que ella vive en frente de uno y no causan molestias.
Otros inconvenientes que señala este grupo reivindicativo es el agravamiento de los problemas de aparcamiento, el mal estado de calles como María de Pablos Cerezo o San Antón, donde además hay garajes privados, lo que puede ralentizar el tráfico, según afirman, y la reducción del horario de carga y descarga, dificultando el abastecimiento a los negocios de la vía.
Por otro lado, esta plataforma ciudadana es partidaria de ejecutar el proyecto ya redactado en el anterior mandato corporativo, que cuenta con una subvención procedente de fondos europeos, además de exigir limpieza de alcantarillas, mejora del alumbrado, supresión o reorientación del carril bici y control de la velocidad a un máximo de 20 kilómetros por hora «para garantizar la convivencia entre vecinos, viandantes y comerciantes». Todas estas actuaciones deben ir unidas, a su juicio, de actuaciones de promoción del comercio de proximidad de la zona.
Uno de los argumentos que utilizan los opositores al bulevar peatonal es que no entienden que se lleve a cabo «en apenas 200 metros; si fuera un corredor continuo tendría más sentido», mantienen.
Recogida de firmas. Los promotores de la iniciativa, que han iniciado una recogida de firmas, añaden que han mantenido contactos con otros colectivos como la Plataforma contra el ruido, FECOSE, taxistas y transportistas, así como otras asociaciones de vecinos y del tercer sector «que comparten nuestras preocupaciones».
El Ayuntamiento adjudicó el 19 de octubre un contrato menor a Seicer Ingeniería, por valor de 8.222 euros para la revisión del proyecto de asfaltado de calzada y canalización para redes en esta calle, desde la glorieta de la Universidad a Somorrostro, con un plazo de ejecución de un mes. Se trata de modificar el proyecto redactado por esta misma empresa por encargo del anterior gobierno municipal de PSOE-IU, en este caso por valor de 12.705 euros, que se entregó a principios de año.
Además, esta misma semana, el Ayuntamiento ha adjudicado otro contrato menor, por 1.270, euros a Impremed, para diseñar tres infografías de la calle. El alcalde, José Mazarías, ha informado de que el concejal de Obras, José Luis Horcajo, ya ha ofrecido información en una reunión celebrada en la sede de la asociación de vecinos el 4 de octubre y habrá una nueva presentación del proyecto acompañado precisamente de esa simulación virtual que considera puede contribuir a convencer a los escépticos.
Desde la plataforma señalan que en esa reunión de octubre el concejal manifestó su intención de peatonalizar la calle «sin margen alguno a que los vecinos y comerciantes podamos opinar o sugerir modificaciones».
Por su parte, Mazarías cuestiona la representación de este colectivo ciudadano y, aunque asegura que lo respeta, indica que «a la vista del apoyo recibido en esta convocatoria – por la presentación de la plataforma el jueves en la plaza del barrio – no es tan mayoritaria como pretende. De hecho, añade que él personalmente ha hablado «con muchos vecinos y comerciantes y están convencidos de que es una solución magnífica». Sí ha trascendido que responsables de algunos negocios de la zona son partidarios del bulevar propuesto.