El transporte público con autobuses urbanos de Segovia está en proceso de transformación. El concejal José Luis Horcajo ha informado de algunas modificaciones, entre ellas el aumento de las tarifas previsiblemente a partir de primavera, pero quedan cuestiones pendientes, entre otras en las dos líneas, la 11 y la 12, que comunican el casco urbano con la Estación Segovia Guiomar de alta velocidad ferroviaria. En la actualidad los autobuses ofrecen un servicio «a la carta»; es decir, en principio se coordina con los horarios de los trenes, lo que produce desajustes constantes, cuando Renfe introduce cambios o cuando hay retrasos por diferentes motivos. Desde la plataforma de usuarios recurrentes de trenes Avant abogan porque los autobuses tengan frecuencias de 15 minutos pero señalan que la última propuesta de los responsables municipales es de 25 minutos, algo que consideran excesivo y contraproducente. «Es casi el mismo tiempo del recorrido del tren entre Segovia y Madrid», responden.
Esta plataforma, a la que pertenecen gran parte de los usuarios recurrentes de las lanzaderas que comunican con Madrid y Valladolid, entre otros a centenares de trabajadores y estudiantes con residencia en Segovia, informa de que también han solicitado al edil de Transportes y Movilidad refuerzos en horas punta, especialmente en el primer tramo de la mañana y, a falta de frecuencias de 15 minutos, han trasladado un estudio con los desajustes que se están produciendo entre los horarios de autobuses y trenes como, por ejemplo, a las 20 horas, cuando llega uno de los convoyes de Renfe, coincidiendo con la salida de un urbano, por los que los viajeros tienen que esperar 20 minutos hasta el siguiente, según ha explicado Elena Barquilla, una de las portavoces de los usuarios.
Otro usuario recurrente, en este caso procedente de Madrid, Fernando Postigo, ha remitido un escrito, incluyendo un diagrama de horarios, dirigido a la Inspección del área municipal de Movilidad para demostrar la posibilidad de ajustar el horario del autobús con otro tren, el que llega a Guiomar a las 7,10 horas. Cualquier mínimo retraso motiva que los viajeros pierdan el urbano, que sale de la parada de la estación a las 7,12 horas. «Somos varios los usuarios que hemos reclamado un cambio pero, sin embargo, no hemos recibido respuesta desde hace meses», dice Postigo, quien asegura que «retrasar la salida de este autobús 4 minutos (hasta las 7,16 horas) no tiene ninguna repercusión negativa en el resto de trayectos; es más, los viajeros que lo utilicen para tomar un tren con destino a Madrid a a las 8,04 horas «tendrían una espera de 10 minutos en la estación en lugar de 14 minutos».
Añade este usuario que en el tren de las 7,10 horas llegan a Segovia «sanitarios y funcionarios que, en muchos casos, tienen que desplazarse a pueblos de la provincia para incorporarse a sus puestos de trabajo» y alerta de que algunos sanitarios «se plantean dejar su puesto de trabajo en Atención Primaria, al no poder compatibilizar horarios».
Por su parte, el concejal comenta que, aunque el gobierno municipal y la empresa adjudicataria son partidarios de ofrecer un servicio normalizado, con frecuencias, son los usuarios recurrentes los que no lo aceptan. «Quieren la mayor coincidencia con los horarios de los trenes pero lo que ocurre es que Renfe los cambia y perjudica a ese servicio - algo que ha ocurrido, por ejemplo, con el de las 7,10, que antes llegaba tres minutos antes -. Estamos dispuestos a estudiar cualquier opción, hacer algún pequeño cambio, pero no podemos modificar los horarios cada dos por tres. Dentro de unos meses vamos a tener un nuevo operador en la línea de alta velocidad y tendremos que valorar la demanda que pueden tener sus servicios»
Acuerdo plenario. Por otra parte, Sylvia García de la Vera, también portavoz de la Plataforma de usuarios de trenes Avant, recalca que el principal problema sigue siendo la falta de plazas en los trenes, entre otros motivos porque los precios bonificados han motivado que muchos estudiantes se hayan planteado ir a Madrid y regresar en el día a su residencia en Segovia. En este sentido, este colectivo considera un gran éxito la unanimidad de los concejales del Ayuntamiento de Segovia para reclamar desde el ámbito institucional al Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible sus demandas a Renfe y Adif.