La batalla de las 12 regiones

Javier M. Faya (SPC)
-

Los comicios autonómicos del próximo 28 de mayo podrían suponer un vuelco en el mapa político de España meses antes de las generales

La batalla de las 12 regiones - Foto: Alejandro Martínez Vélez

Cuando faltan poco menos de dos meses para que el próximo 28 de mayo se celebren las elecciones locales, no hay que olvidar que habrá otra urna en los colegios, la de las regionales en 12 comunidades:Madrid, C. Valenciana, Extremadura, Castilla-La Mancha, Navarra, Aragón, Cantabria, Islas Canarias, Murcia, Asturias, Baleares y La Rioja. 

En nueve de ellas gobierna el PSOE, en dos el PP y en la restante una formación nacionalista, el Partido Regionalista de Cantabria (PRC) de Miguel Ángel Revilla. Así lo dictaminó la ciudadanía hace cuatro años y ahora ya no está tan claro a tenor de las encuestas que van circulando en las últimas semanas y, sobre todo, de noticias que pueden poner todo patas arriba en algunos lugares. 

Ese es el caso, por ejemplo, de Canarias, donde la sombra del Tito Berni puede llevarse consigo al Ejecutivo de Ángel Víctor Torres (PSOE), por las ramificaciones de esta red en el archipiélago. También es posible que el caso Mediador haga daño a los socialistas en autonomías donde no alcanzan los tentáculos de esa red como ya les sucediera a los progresistas con los ERE andaluces o a los populares con la trama Gürtel. En teoría, la gente está valorando la gestión de los gobernantes de sus comunidades en los últimos cuatro años (dos en el caso de la madrileña), pero lo cierto es que es un factor a tener muy en cuenta.   

Como también que muchos ven los comicios regionales (y municipales) como una especie de primera vuelta de las elecciones generales o incluso de plebiscito sobre la gestión del Ejecutivo central. Es por eso que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, recorrerán toda España arropando a sus candidatos, pues, en teoría, siete meses después, volverán las urnas, las de las legislativas.  

También podría darse el caso de que se produjera un adelanto electoral según sean los resultados del 28-M. Baste recordar que, antes de dejar la política, José Luis Rodríguez Zapatero sacó las urnas el 20 de noviembre de 2011. Fue casi un año antes de lo que le correspondía porque en primavera se había producido un vuelco en las autonómicas y en las municipales (Extremadura y Castilla-La Mancha se llegaron a teñir de azul) y la tendencia era que los populares avanzaban de forma imparable. Tanto como el desgaste del Gobierno socialista en medio de una crisis económica que lo devoraba.

El multipartidismo, en jaque

Además de la lucha entre los dos grandes partidos por el poder en 12 autonomías (y 8.131 municipios), está por ver si en esta cita las formaciones llamadas a acabar con el bipartidismo sobreviven. Por de pronto Ciudadanos, que estuvo a punto de entrar en La Moncloa no hace mucho, puede certificar su defunción política para beneficio del PP. Según los sondeos, parece que Vox crecerá y en algunas regiones irrumpirá en sus Parlamentos, en tanto Podemos vive horas llenas de incertidumbre.  

La formación morada busca no quedar diluida por el efecto Yolanda Díaz y Sumar, por lo que buscará comandar una confluencia de partidos para los próximos comicios. Resulta curioso porque la vicepresidenta segunda del Gobierno no se ha cansado de decir que la plataforma estaría lista para las generales y no para el 28-M. Pero Podemos la apremia para que lo haga ahora. La número dos, Irene Montero, así se lo hizo saber públicamente el pasado martes, al tiempo que le exigió que se pliegue a las condiciones de su grupos, esto es, que se someta a unas primarias bilaterales y le conceda una cuota de poder mucho mayor que a los socios de la gallega (15). Según las malas lenguas, la exdirigente de IU espera un descalabro de los de Belarra para luego negociar.

Son muchos los interrogantes a resolver, por lo que se presentan semanas apasionantes llenas de encendidos debates y elucubraciones.

Madrid. Isabel Díaz Ayuso

Los populares, salvo accidente, son claros favoritos

Sueña la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, con que el próximo 28 de mayo se repita lo que sucedió en Andalucía el 19 de junio del año pasado:que el PP no necesite a Vox para gobernar. 

Desde luego la imagen dada esta semana por los dos partidos es que los puentes están destruidos. Yno es para menos, porque la formación liderada en la región por Rocío Monasterio bloqueó los Presupuestos de 2023 y tumbó la última medida fiscal estrella del Gobierno regional, incentivos a inversores extranjeros; un mazazo con sabor a traición para la popular. 

Con una relación que llevaba meses languideciendo, este último rechazo a la medida que la madrileña abanderaba para contrarrestar el impuesto a las grandes fortunas de La Moncloa, ha sido el detonante de su divorcio final. No.obstante, ambas formaciones necesitan marcar sus diferencias ante la cita electoral en una batalla por un votante que hasta no hace mucho era fiel a Génova y que tornó luego a la formación de Abascal.

Ahora hay que ver quién sale ganador de ese relato, ya que quizás de esto dependa que Ayuso gobierne en solitario o con el bloque de derechas. Porque Ciudadanos ni está ni se le espera. 

Y es que los naranjas, que fueron barridos en los comicios que adelantó en 2021 la presidenta alegando que le preparaban una moción de censura, tienen una cabeza de cartel, la semidesconocida Aruca Gómez, con remotas, por no decir nulas, opciones. 

Casi todas las encuestas publicadas, incluso las de Génova, no se cansan de pronosticar una victoria contundente de los populares, mayor incluso que la de hace dos años. ¿Hasta qué punto? Todo dependerá de si las 333.403 personas que le dieron su confianza a Vox mantienen su fidelidad o no después de la ruptura de relaciones y la moción de censura fracasada. Las perspectivas, antes del encontronazo con sus antiguos socios, era que iban a mantener sus 12 parlamentarios en la Asamblea de Madrid. 

Mónica García sigue subiendo. También vaticinan varios sondeos, que no parecen reflejar un castigo a los conservadores por las huelgas de médicos en Atención Primaria y Pediatría en hospitales y ambulatorios de la Comunidad, una subida, algo moderada, de Mónica García, la líder de la oposición y candidata de Más Madrid, que se consolida como segunda fuerza política. 

Las perspectivas de Juan Lobato, el número uno del PSOE, son negras, y todo indica que va a hacer bueno el resultado cosechado hace dos años por Ángel Gabilondo. El aspirante socialista, curtido en la Cámara, es poco conocido fuera de ella, como él mismo reconoció con gracia en su presentación. La irrupción de la exministra Reyes Maroto como candidata a alcaldesa de la capital no parece que arrastre al electorado.   

En cuanto a Podemos, es difícil que llegue al 7,24 por ciento que logró Pablo Iglesias. Parece más cerca del 6, con peligro de caer por debajo del 5, el abismo:se quedaría sin representación.  

Comunidad Valenciana. Ximo Puig

Compromís tiene la 'llave' del poder

El Govern multicolor de la Comunidad Valenciana estaba dando muestras de fatiga desde hace tiempo, sobre todo a raíz del escándalo de abusos de menores que acabó con la carrera política de la vicepresidenta Mónica Oltra, de Compromís. Para el jefe de la Generalitat, Ximo Puig, fue un respiro su dimisión en junio de 2022. Yeso por no hablar de la trama Azud y una supuesta financiación irregular de los socialistas en la región que fue llevada al Senado hace un mes. 

Para colmo de males, el aspirante del PP, Carlos Mazón, le está haciendo mucho daño, pues su discurso, agresivo y muy cercano al de Isabel Díaz Ayuso, está calando en la sociedad valenciana. No hay que olvidar que hasta no hace mucho (1995-2015), esta comunidad era un fortín para los populares, si bien los escándalos de corrupción hicieron que la formación se desmoronara. Tras limpiar la casa y llevarse a cabo una travesía por el desierto con una candidata, Isabel Bonig, que no convencía y cuya imagen se asociaba a Francisco Camps (fue consejera con él), el presidente de la Diputación de Alicante y líder de los conservadores levantinos tiene tirón y, sobre todo, juventud (48 años), en comparación con el veterano dirigente socialista (64). Además, habla en clave plebiscitaria, algo que el president intenta evitar siempre.    

Según las encuestas, el PP se dispara, Cs desaparece y Vox crece. ¿Será suficiente para acabar con el Botanic? Todo dependerá del descalabro que sufra Compromís, que tiene la llave. Joan Baldoví ha dejado Madrid para amortiguar la caída. Puig está en sus manos. 

Extremadura. Guillermo Fernández Vara

El PSOE gobernará con o sin compañía

El incombustible presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, afronta con optimismo los próximos comicios regionales. Salvo catástrofe, se mantendrá en el antiguo Hospital de San Juan de Dios de Mérida otros cuatro años más. Lleva tres legislaturas en el poder y parece que será la última, o eso promete, por lo que no batirá el récord de seis de su mentor, Juan Carlos Rodríguez Ibarra. 

Este médico de profesión, que en sus inicios militó en AP (fue muy amigo del antiguo líder conservador Antonio Hernández Mancha), cumplirá 65 en octubre y ha dejado claro varias veces que este, si gana, será su último mandato. Su carisma en la comunidad es incuestionable y no aparece aún un posible delfín. Suena José Antonio Pajuelo, pero todavía está verde.  

En el PP le echará el pulso María Guardiola después de que se retirara José Antonio Monago, que obró el milagro de gobernar en 2011 gracias a los comunistas. 

Hay encuestas que le quitan la mayoría absoluta a Vara, pero los conservadores, pese a la subida, se quedan aún muy lejos. Podrían contar con Vox, que irrumpe en el Parlamento autonómico, pero los progresistas saben que siempre pueden echar mano de IU, que posiblemente crezca.

Castilla-La Mancha. Emiliano García-Page

Una lucha titánica entre Page y Núñez

El presidente de Castilla-La Mancha, el socialista Emiliano García Page, confía en hacer valer el colchón que mantiene sobre los populares para firmar su tercera legislatura. Yes que el PSOEdispone de 19 diputados, el PP 10 y Ciudadanos cuatro. Lo más probable, con las encuestas en la mano, es que los naranjas desaparezcan del Parlamento autonómico y gran parte de los votos se marchen al candidato conservador, Paco Núñez, que repite como cabeza de cartel. No obstante, la casi segura irrupción de Vox implicará, probablemente, menos sufragios para este. También habrá que ver si Podemos entra en liza, aunque no es probable.

Así las cosas, el toledano, que junto a Javier Lambán le ha plantado cara a Pedro Sánchez en algunos asuntos nacionales, goza de gran carisma. Por algo lleva ocho años en el poder. 

A esto hay que añadir que la región, tradicionalmente, ha sido socialista:salvo en la VIII Legislatura (2011-2015) con la popular María Dolores de Cospedal, el jefe del Ejecutivo castellano-manchego ha sido siempre del PSOE. José Bono gobernó entre 1983 y 2004, José María Barreda entre 2004 y 2011 y García Page entró en 2015. 

La lucha va a ser encarnizada, pues hay encuestas que le dan la mayoría absoluta al líder progresista y otras a los populares con Vox de aliados. 

Murcia. Fernando López Miras

La moción le sentó bien al PP

Pese a que no fue la fuerza más votada en Murcia en 2019, el PP revalidó su mandato (lleva en el poder desde 1995) gracias a Ciudadanos, que dos años después le planteó una moción de censura que apoyaba el PSOEy que fracasó. Las encuestas castigan a los liberales y a los socialistas, pero bendicen al presidente, Fernando López Miras.    

El político conservador roza la mayoría absoluta y puede que no necesite el respaldo de Vox que, como los naranjas, sufrió un cisma:tres diputados (y cuatro de Cs) se pasaron a las filas populares. Yeso le dejó muy tocado. 

Asturias. Adrián Barbón

Los socialistas lo tienen de cara

Es Asturias uno de los feudos del PSOE y todo indica que así seguirá siendo, ya que los socialistas duplican en el Parlamento a los populares, cuyo candidato, Diego Canga, es prácticamente un desconocido en el Principado. Su carrera política ha transcurrido casi íntegramente en Bruselas.  

Lo más probable es que el PP mejore los desastrosos resultados de 2019 y pesque votos de Ciudadanos y Vox, pero no parece que vaya a inquietar a Adrián Barbón, que viene respaldado por las encuestas y solo ha necesitado de IU para estar en el poder.  

Baleares. Francina Armengol

Por una nueva 'macedonia' 

No corre peligro la Presidencia de Baleares para Francina Armengol. Yes que cuenta con muchos aliados, progresistas y soberanistas. De ahí las críticas a una presunta persecución lingüística. Dentro el Govern la apoyan Unidas Podemos y Més per Mallorca, y fuera Més per Menorca, Gent per Formentera y El Pi.  

La cabeza de cartel del PP, Margalida Prohens, no parece ser una amenaza, sobre todo porque su imagen ha salido dañada esta semana por una comida con un exdirigente del partido condenado por corrupción. Cs va directo a la irrelevancia y Vox tiene poco peso.

La Rioja. Concepción Andreu

Un resultado muy apretado

La presidenta de La Rioja, Concha Andreu, se enfrenta a su reválida el próximo 28 de mayo. Confía en no tener que depender de sus socios, Podemos-Equo (con quien comparte poder) e IU, si bien eso parece inevitable en el mejor de los casos.  

Yes que el desplome de Ciudadanos, que actualmente tiene cuatro diputados, así como la inercia que llega de Madrid, va a favorecer al PP (12), que recortaría distancias con el PSOE (15). Otra cuestión es que irrumpa Vox en el Parlamento y le reste a los populares. Según las encuestas, no hay un favorito claro. 

Navarra. María Chivite

Otra vez en manos de Bildu

La falta de acuerdo entre PP y UPN para concurrir juntos en los comicios forales, como hicieron con Cs en 2019 (Navarra Suma), juega en contra del centro-derecha, algo que favorece a la presidenta, la socialista María Chivite.

Según los sondeos, UPN, que gobernó 23 años, se hundirá, lo que lastra a los populares, por mucho que suban, e incluso contando con Vox. El PSOEtiene sólidos aliados (Podemos, Geroa Bai y Ezkerra) y, llegado el caso, EH Bildu, con quien se han cumplido compromisos acordados a nivel estatal y regional,  podría respaldarle como en 2019.

Aragón. Javier Lambán

El PP tiene una ligera ventaja

Mucho tendrá que hacer el socialista Javier Lambán para mantener el Gobierno de Aragón. Al menos eso es lo que dicen las encuestas. La caída del PSOE y de Podemos puede ser considerable mientras que el PP se dispararía, sobre todo fagocitando a un Ciudadanos que pasa de implantado a la UCI.  

También hay que tener en cuenta que el candidato popular, Jorge Azcón, cuenta con tirón. Es el alcalde de Zaragoza desde 2019 y lleva 12 años como edil. El pasado lunes le propuso a su gran rival que se favorezca gobernar a la lista más votada. Espera respuesta.

Cantabria. Miguel Ángel Revilla

Peligra el fortín de la veteranía

Parece mentira, pero el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, cumplió el pasado enero 80 años, lleva 16 en el poder y se presenta en mayo por octava vez para liderar el Ejecutivo autonómico. En el Parlamento gobierna cómodamente:a sus 14 diputados se suman los siete del PSOE, a cuyo líder nacional, Pedro Sánchez, ha sido siempre fiel. 

Enfrente, el PP, que parece subir como la espuma. María José Sáenz de Buruaga, que iba a ser defenestrada por Pablo Casado, podría hacer que el bloque conservador recupere la región ocho años después.  

Islas Canarias. Ángel Víctor Torres

La amenaza  del 'Tito Berni'

Antes de que estallara el caso Mediador, el presidente de Canarias, el socialista Ángel Víctor Torres, preparaba sus armas de cara a las elecciones teniendo en el foco a una rival de mucha altura: Ana Oramas. La veterana política de CC, que lleva en el Congreso de los Diputados desde 2007, tiene muchísimo tirón en el archipiélago y era una seria amenaza para el progresista.  

Pero entonces irrumpió el Tito Berni, que parece haberle dado de lleno al PSOE de Canarias. El castigo en las urnas es más que previsible y se espera un cambio de Gobierno.