En una temporada 'normal', Fernando Alonso (Aston Martin) estaría en disposición de pelear el Mundial de Fórmula Uno con su actual rendimiento. Sin embargo, el rendimiento de otro planeta de Red Bull y de Max Verstappen mantienen a raya cualquier tipo de sublevación por parte de un piloto asturiano que llevó a su escudería a su mejor posición histórica en elGranPremio de Mónaco.
En las calles del circuito de Montecarlo se podía oler la victoria 33 del ovetense en las jornadas previas al fin de semana. Y esta estuvo más cerca que nunca en los últimos tiempos de llegar. Alonso se mantuvo a la zaga de un Verstappen que ni siquiera con un agresivo desgaste de neumáticos cometió errores.
Un día antes, el neerlandés, doble campeón mundial de la categoría reina del automovilismo, había dado un paso de gigante para ganar la carrera dominical y evitar la rebelión de su principal rival fuera de su equipo.
Y es que 'Mad Max' sorprendió a todos cuando Alonso saboreaba su primera 'pole' de la temporada. El español había coloreado de morado los dos primeros sectores del trazado del Principado de la Costa Azul, pero en el tercero existía un pequeño margen de mejora. Fue ese mínimo resquicio el que aprovechó Verstappen para ser la cabeza de la parrilla en la carrera en un circuito donde es casi imposible hacer adelantamientos.
Aún así, durante las 78 vueltas que los pilotos tuvieron que dar a una pista cambiante en sus condiciones, Alonso tuvo sus opciones. Y es que la estrategia cobra un papel más importante en este tipo de citas, pero Aston Martin no eligió bien en un momento de caos que le pudo dar la gloria.
La decisión
Cuando la lluvia comenzó a hacer acto de presencia en Montecarlo solo por zonas, la escudería británica, en connivencia con el asturiano, decidió montar las gomas medias en vez de las intermedias. ¿El resultado? Un nuevo paso casi inmediato por 'boxes' para montar unos neumáticos con mayor adherencia en mojado.
Ese tiempo de más que invirtió el ovetense en rectificar la decisión inicial no le costó el segundo puesto, pero sí renunciar a una posible lucha con Verstappen en el tramo final de la carrera, cuando el trazado comenzó a secarse bastante rápido y los nervios comienzan a hacer acto de presencia.
No es el caso del neerlandés que sigue dando pasos firmes hacia un nuevo campeonato al que Alonso no va a renunciar, ya que opina que «con estos resultados estaría liderando otras temporadas».