Cáritas Segovia busca ayuda para ayudar

M.Galindo
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El progresivo descenso en el número de socios y donantes preocupa a la organización, que en 2022 ha visto duplicado el número de beneficiarios de sus programas de acompañ

Ángel Anaya, director de Cáritas Segovia. - Foto: Rosa Blanco

El año 2022 concluyó en Cáritas Diocesana de Segovia con una sensación "agridulce", en palabras de su director Ángel Anaya Luengo. Los datos de la recién presentada memoria de actividades indican que el año en el que se concretó la desescalada de la pandemia y se agudizó la crisis económica, por la organización dependiente de la Iglesia Católica pasaron un total de 3.328 participantes, un 27% más que en el año anterior, lo que elevó hasta los 7.001 los beneficiarios registrados a lo largo del pasado año.

«Cuando haces más, el sentimiento es de que podemos prestar más ayuda a quienes nos la piden -asegura-, pero a su vez ello supone que cada vez hay más gente que la reclama, lo cual resulta muy preocupante».

Así, la labor de Cáritas Segovia el pasado año se ha visto marcada por las consecuencias de la crisis económica derivada de la pandemia, que ha contribuido a cronificar las situaciones de precariedad que golpean a muchos de los hogares segovianos.

Después de la pandemia, los efectos de la guerra de Ucrania, la crisis migratoria y millones de refugiados; también, la inflación, la crisis energética y los desastres naturales pone sobre la mesa el drama de miles de personas que malviven con escasos recursos y poco a poco van pasando a las filas de los olvidados, de los que no tienen acceso a una vida digna en derechos y oportunidades.

Así, los programas de ayuda vinculados más directamente con la atención directa a las personas y familias más vulnerables han sido los que mayor demanda ha registrado, tales   como el de Acogida y Atención Primaria como puerta de entrada a los recursos que ofrece la asociación, el de Empleo o el de Personas Sin Hogar.

De igual modo, el perfil de los participantes  -en gran número procedentes de otros países- ha incrementado la actividad en otros como el Servicio de Orientación Jurídica (SOJ) , que ha prestado su apoyo asesoramiento en asuntos relacionados con extranjería, asesoría laboral, fiscal o penal.

Anaya señala que el perfil del demandante de ayuda y acompañamiento se va equilibrando, y aunque siguen siendo mayoritarias las peticiones de personas extranjeras, el número de nacionales que acuden a Cáritas alcanza en Segovia ya el 45%.
En este sentido, el director de Cáritas considera que este incremento obedece a que «la gente ya no se siente juzgada ni estigmatizada por solicitar ayudas, fruto del esfuerzo realizado por nuestra organización para dignificar el acceso a través de iniciativas como las tarjetas-monedero, mediante las cuales los beneficiarios pueden llenar la cesta de la compra en un comercio convencional sin tener que acudir a economatos».

En breve, quizá en este mismo mes, estas ayudas se completarán con la puesta en marcha de la tienda solidaria Moda_Re, en el barrio del Cristo del Mercado, donde con una filosofía similar a la de las tarjetas monedero, las personas podrán acceder a comprar ropa de segunda mano con todos los parámetros de calidad.

Pero los recursos para hacer frente a los gastos que originan los programas de ayuda y acompañamiento no crecen en la misma medida que el número de demandantes. Cerca del 60% del presupuesto anual de Cáritas en Segovia depende de las subvenciones institucionales , y el resto de las cuotas de socios y la aportación de donantes.

En cuanto al balance económico de Cáritas Diocesana de Segovia, 2022 cerró con 1.362.537,21 euros, mientras que los gastos ascendieron a 1.187.938,82 euros, lo que arroja un saldo positivo de 174.598,38 euros.  Pese a ello, los gastos prorrateados de la adecuación de la sede de Cáritas en el antiguo convento de San Juan de Dios dejan a la entidad con un saldo negativo cifrado en 49.000 euros.

El progresivo envejecimiento de la población está disminuyendo el número de socios, y las donaciones se retraen también, lo que anima a Cáritas Segovia a explorar otras vías de financiación. «Es un tema que verdaderamente nos preocupa, porque encadenamos varios años de pérdidas, pero con iniciativas como la próxima puesta en marcha de la nueva web podremos hacer llegar a la sociedad lo que estamos haciendo y ser proactivos a la hora de recabar su apoyo».

De este modo, Anaya confía en que la solidaridad que los segovianos han demostrado en campañas puntuales como la guerra en Ucrania o el terremoto de Turquía y Siria pueda cristalizar en apoyos más continuados en el tiempo.
 

Residencias y voluntariado La gestión de las tres residencias de personas Mayores que Cáritas mantiene en La Lastrilla, Cuéllar y Sepúlveda comienza a recuperarse tras el varapalo de la pandemia, y en este sentido, el director de Cáritas hace un balance positivo de la evolución registrada este año, donde no sólo se ha recuperado el número de residentes, sino también  el prestigio perdido en anteriores periodos de gestión, lo que en opinión de Anaya permite vislumbrar el futuro con optimismo, aún conscientes de que «queda mucho camino por recorrer, pero vamos por el buen sendero».

Por otra parte, el voluntariado es uno de los ejes fundamentales de la labor de Cáritas en la provincia, y 2022 ha consolidado el número de personas que colaboran en la ayuda y acompañamiento en los distintos programas.

Así, un total de 245 personas destinaron su tiempo y su esfuerzo a Cáritas, con un significativo aumento en el número de jóvenes fruto de las campañas de captación que se vienen realizando en los centros educativos y universidades.

Sobre este aspecto, Anaya subrayó la importancia que tiene el relevo generacional en el voluntariado de la organización, donde los jóvenes aportan «savia nueva necesaria» para mantener vivos los programas, sin olvidar la experiencia de los voluntarios que durante años han entregado su esfuerzo y su tiempo a esta solidaria labor.