Jefe con placas

Nacho Sáez
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El segoviano Juan José García Herrero, responsable del mayor parque fotovoltaico de Acciona en España, llama a realizar una expansión responsable y bien planificada.

Jefe con placas

El parque fotovoltaico con cerca de 700.000 placas que va a instalarse en Abades, Martín Miguel y Valverde del Majano ha evidenciado que la expansión de la energía solar continúa a buen ritmo a pesar de que hace años ya que comenzó. Y tiene retos todavía por afrontar, según explica el segoviano Juan José García Herrero, experto en este tipo de plantas. «No se trata solo de poner instalaciones. Hay que hacerlo de una manera ordenada, bien planificada y responsable», explica.

Licenciado en Ingeniería de Montes por la Universidad Politécnica de Madrid, García Herrero es responsable de energía fotovoltaica de Acciona Energía en Extremadura, donde esa multinacional tiene cuatro plantas y entre ellas la más grande del grupo en España. «Gestionar este tipo de instalaciones requiere muchos medios. Tenemos un equipo de operación y mantenimiento y lo que hacemos es programar todas las intervenciones de la instalación para que no haya indisponibilidades y la producción sea la que tiene que ser y aplicar mantenimientos preventivos, correctivos...», señala sobre su trabajo, al que llegó despúes de hacer la especialidad de Industria durante la carrera y hacer su proyecto de fin de carrera sobre la energía eléctrica.

España aumentó un 21,7 por ciento en 2022 -respecto al año anterior- la potencia fotovoltaica acumulada, que además se multiplicó por cuatro respecto a 2018, según un estudio de DBK Observatorio Sectorial recogido por Europa Press. «El plan de descarbonización de las instalaciones de generación de energía es una realidad. Todo el mundo tenemos que trabajar en esa línea. Las instalaciones anteriores no van a ser sostenibles en el tiempo y todos queremos dejar un bonito mundo a nuestros hijos y nietos, así que no nos va a quedar otra», apunta García Herrero.

La energía solar es limpia pero su producción va mucho más allá de instalar miles de placas solares en grandes parcelas, en tejados o en pantanos, como es el caso de uno de los parques fotovoltaicos que gestiona este segoviano: «Instalaciones enormes como las que gestionamos en Extremadura son extensiones muy grandes con muchísimas unidades de los mismos equipos y muchas incidencias que hay que ir solventando para que la indisponibilidad sea a lo largo del año la menor posible». Los expertos tienen claras cuáles son las asignaturas pendientes para abordar con mayor eficacia este desafío. «Hay que trabajar acorde a una demanda porque es una auténtica lástima que se viertan -o se tiren a la basura, hablando en términos coloquiales- megavatios renovables porque no tengan una demanda», señala García Herrero como el primero de los retos.

No es el único: «Hay que mejorar mucho lo que son las líneas de transporte porque no todo lo generado se puede transportar. Las líneas de transporte tienen una capacidad que no se puede sobresaturar. No es cuestión de poner [plantas] fotovoltaicas por todos los lados, como es ahora la moda. Ese no es el negocio. El negocio es que no se vierta ningún megavatio renovable, que son megavatios sin prácticamente ningún impacto para el medio ambiente. El objetivo es que se puedan consumir».

España es uno de los líderes mundiales en producción de energía solar, pero China se ha convertido en el gran imperio  en este ámbito. «Es muy importante la generación [de energía solar] pero también el almacenamiento. Ya hay instalaciones de baterías que, para evitar el vertido de esta de estas generaciones eléctricas, permiten un almacenamiento para que luego se puedan aprovechar esos megavatios en horario nocturno. El tema de las baterías se está potenciando mucho y hemos hecho instalaciones, por ejemplo, en Estados Unidos, hay varios proyectos también a nivel España para desarrollar. Es una manera también limpia de que esos megavatios que no hemos podido meter en la demanda del sector, podamos almacenarlos y aprovecharlos en el momento adecuado», asevera García Herrero.

Acciona Energía presume de operar solo con tecnologías renovables y de haberse situado en vanguardia del proceso de descarbonización con soluciones avanzadas que permiten a empresas, instituciones, negocios y particulares reducir su huella de carbono. En la provincia de Segovia, esta multinacional tiene un parque eólico en el entorno de Pradales, Navares de Enmedio y Aldeanueva con 40 aerogeneradores y 34 megavatios de potencia. También planea nuevos proyectos en Castilla y León. «Existe el peligro de saturar las redes de transporte. Muchas redes de transporte están dimensionadas para las  instalaciones que había hace bastantes años, pero si se multiplican las instalaciones de renovables existe el riesgo de que haya instalaciones paradas. Aparte Red Eléctrica pone cada vez más requisitos», remarca García Herrero, en formación continua. «Siempre tengo en la cabeza mejorar y estar a la última para sumar. Y Acciona Energía es una gran compañía para trabajar. Somos la única empresa que nuestra generación se basa en energía cien por cien renovable. Es una apuesta de negocio, pero Acciona piensa muy bien sus instalaciones en cuanto a la oferta y demanda de megavatios. No se lanza a lo loco a hacer instalaciones», concluye este segoviano.