En Andalucía salta a la palestra un problema que, por distancia que le separe de la provincia de Segovia, no difiere demasiado de lo que desde hace años vienen denunciando vecinos, asociaciones medioambientales y Ayuntamientos. Asi, la tercera fase de la recarga del acuífero de El Carracillo bien podría ser el Doñana segoviano. Según explican las distintas informaciones recogidas en medios locales, regionales y nacionales, el problema más grave de Doñana es la disminución de su acuífero con la extracción de agua para los regadíos entre los que se encuentra curiosamente uno de los productos que también se cultiva en la comarca segoviana: la fresa.
El Parque Natural y Nacional de Doñana comprende las provincias de Huelva, Sevilla y Cádiz, con una superficie de 112.487 hectáreas. En El Carracillo, la superficie afectada es sin duda muchísimo más pequeña, pero el problema de fondo es el mismo, la falta de agua.
La polémica andaluza viene dada por la modificación del proyecto de ley que amplía las hectáreas regables en la zona y que ha causado mucho rechazo entre instituciones medioambientales, científicos e incluso ha llegado a Bruselas y la cuestión que afecta a El Carracillo y al río Cega también llega al parlamento europeo.
La concejal de Izquierda Unida en Cuéllar, Lucía Arranz, ha expuesto el problema en una reunión con la eurodiputada Sira Rego y se han registrado varias preguntas parlamentarias al respecto. Así se cuestiona si desde el parlamento se conoce la decisión del Ministerio de Transición Ecológica de reducir el caudal del río Cega para poder derivar más agua a la Comunidad de Regantes. Además se preguntan si habrá que esperar a que los daños estén hechos para poner soluciones como ha ocurrido en otros lugares de España y si se plantean acciones desde el Parlamento para evitar consecuencias que puedan ser irreversibles. Arranz explica que el rio Cega al igual que Doñana es Red Natura 2000 de la Unión Europea.
El pasado marzo, la Junta de Castilla y León a través de la Consejería de Agricultura y Ganadería informaba a la Comunidad de Regantes del proyecto cuyas obras comenzarán en los próximos meses para abastecer de agua de riego a los municipios de Sanchonuño, Arroyo de Cuéllar, Chañe, Remondo y Fresneda de Cuéllar; en los que no existe acuífero cuaternario, por lo que no tienen capacidad de recarga. El Bocyl recogió la publicación del plan de obras para mejorar el regadío de esta zona así como las infraestructuras a realizar. El proyecto cuenta con un presupuesto de 17,4 millones de euros para su primera fase y permitirá el riego de 3.000 hectáreas aunque cada año se regarán la mitad.
Estas obras fueron declaradas de utilidad pública, interés general y de urgente ejecución, algo que no comparten las asociaciones medioambientales ni los propietarios afectados. «Nosotros estamos en contra de que se realicen por el gran impacto ambiental que tienen sobre el rio Cega, la Tierra de Pinares, el gran impacto que ya está teniendo la agricultura intensiva que ha contaminado el suelo y las aguas, y esta sobreexplotando el acuífero subterráneo. En esta tercera fase vienen a sobreexplotar el río Cega y el pinar de Gomezserracín que es la única masa de agua sin contaminar que queda en la comarca y que abastece a la Mancomunidad de Las Lomas y muchos municipios que dependen de ella», explica Antonio de Benito, miembro de la Asociación Cega el río que nos une. Este colectivo ha presentado un recurso de reposición a la administración regional instando a que suspendan las obras.
Critican que se quiere expropiar a los vecinos de Gomezserracín más de 900 parcelas de pinares con una superficie de 247.378 metros cuadrados a los que hay que sumar los que se ocuparían con las obras y las infraestructuras; ya que se quieren hacer dos lagunas de unos 9.000 metros cúbicos y una balsa semienterrada de 163.366 metros cúbicos.
Los vecinos temen -como ya ha ocurrido en las zonas de pinar por donde pasan las fases de recarga anteriores- que los pinares se sequen y se niegan a que se realicen las expropiaciones y la recarga. De hecho, según explica el alcalde de Gomezserracín, Martín Ruano, que también se muestra contrario a la tercera fase, los vecinos están recogiendo alegaciones al respecto.
«El municipio de Gomezserracín sigue siendo el principal perjudicado de la recarga porque cuando se ponga en marcha, el nivel freático va a disminuir de forma rápida y nos pasará factura para beneficiar a cuatro», afirma refiriéndose a las industrias agroalimentarias de la zona. No obstante, el alcalde tiene claro que "es una decisión que viene de la Junta y que no da alternativa a realizar el proyecto de otro modo", opina
Con la escasez de lluvias caídas en las últimas semanas, desde la Asociación Cega El Río Que Nos Une apuntan que los niveles de agua del río actualmente son los de principios de verano y la Comunidad de Regantes ya está derivando agua. Por ello han preguntado a la Confederación Hidrográfica del Duero si la modificación de la concesión de agua para los regantes que se aprobó el pasado año, está en vigor ya que había ciertas clausulas. «Creemos que con el caudal que tiene ahora el río no deberían hacerlo porque están poniendo en riesgo el abastecimiento de agua a la Mancomunidad», comenta De Benito.
Si en la provincia de Huelva se concentra el 98% de la producción nacional de frutos rojos, la provincia de Segovia no se queda atrás, porque aquí también se producen y se siembran los plantones que después acaban en Andalucía. A esto hay que sumar el potente desarrollo de cultivos hortícolas desde hace décadas como la zanahoria, el puerro, la endivia, lechuga y el desarrollo del sector agroalimentario como dinamizador económico y poblacional de la zona con tasas de cero paro en algunas localidades que además han crecido en población.