Las lamentables imágenes que dieron la vuelta al mundo de los jugadores del Barça huyendo a los vestuarios del RCDE Stadium el pasado 14 de mayo como consecuencia de la invasión del campo de cientos de aficionados del Espanyol parece que ya tiene consecuencias. Y es que este intento de un grupo de ultras 'pericos' de aguar la celebración del título de Liga de los azulgrana (ganaron 2-4) en su propio feudo va a acarrear una sanción de dos partidos.
El juez instructor nombrado cinco días después por el Comité de Competición, una vez abierto un expediente extraordinario por la gravedad de los hechos, ha propuesto el cierre del estadio durante dos partidos, según se pudo saber ayer.
Esto significa, en la práctica, que se disputen a puerta cerrada, sin público, los dos primeros encuentros oficiales de la temporada 2023/24, que tienen como rivales al Racing de Santander, el fin de semana del 20 de agosto, y al Amorebieta, del 3 de septiembre. No obstante, y mediante un comunicado emitido a lo largo del día, el conjunto catalán anunció de forma contundente que recurrirá esta sanción «a todas las instancias posibles».
A través de un comunicado, la entidad blanquiazul expresó su «total desacuerdo» con la decisión de este organismo. La institución consideró que existe en esta sanción un factor «ejemplarizante» que únicamente responde a «juicios de valor sesgados» y que, en su opinión, «carece de fundamentación».
Tras considerar el castigo injusto y señalar que agotarán «todas las vías de recurso», el club catalán es consciente de que tendrá que moverse con celeridad, ya que en poco menos de dos meses empieza LaLiga Smartbank en casa, concretamente el 20 de agosto, y el siguiente compromiso sería el 3 de septiembre.
Por otra parte, la entidad 'perica' subrayó en un informe que en el partido contra el Barça contó con «todos los medios y medidas necesarias» en su estadio para garantizar la seguridad en un encuentro de este calibre.
Cuerpos de seguridad
Asimismo, el Espanyol recordó que «los propios Cuerpos de Seguridad» validaron los medios y los recursos que destinó el club para el derbi.
También insistió en su rechazo frontal a «cualquier acto violento o comportamiento» que dañe la imagen tanto del club como de su afición. La institución añadió que episodios como los ocurridos en el derbi «no tienen cabida en el fútbol ni en la sociedad».
Hay un dato importante y es que los Mossos habían aconsejado al Barça, que así lo acató, la no celebración en el terreno de juego del título de Liga si lo ganaban.