Denuncian tala de árboles en la CL-601 de La Granja a Valsaín

Europa Press
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Ecologistas en Acción advierte que, durante las obras de refuerzo del firme, se han talado árboles a lo largo del paseo entre La Granja y Valsaín

Aspecto de una cuneta tras la obra y el talado de los árboles. - Foto: EA

Las obras de ensanche y mejora del firme de la carretera CL-601, del puerto de Navacerrada a Segovia, están siendo cuestionadas por Ecologistas en Acción de Segovia, que denuncian la pérdida de arbolado en los márgenes de la carretera. Según su escrito de denuncia, se desarrollan obras permanentes en esta vía, con construcción de rotondas y carriles y la pérdida continuada de arbolado a lo largo de los paseos históricos que jalonaban y daban sombra a lo largo de la vía desde Valsaín a Segovia.

El tramo en obras actual se ejecuta entre La Granja de San Ildefonso y el Puerto de Navacerrada, dentro del Plan Regional de Carreteras de la Junta de Castilla y León. La adjudicataria es la empresa Padecasa.

EA sostiene que, paralelamente al refuerzo del firme, se han talado árboles a lo largo del paseo entre La Granja y Valsaín, se ha hecho "un desbroce desmesurado" de cunetas y márgenes de la vía "y hay un vertido del asfalto procedente del fresado de la vía en los bordes de la carretera que en algunos tramos supera la anchura lógica de la obra".

Los conservacionistas exponen que los vertidos de escombros, talas y eliminación de toda la vegetación a lo largo de los márgenes "son inadmisibles en Europa, según los criterios de protección ambiental y, de forma muy señalada, en esta carretera que atraviesa el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama, espacio protegido con la mayor figura de protección de España, por los valores naturales y culturales que contiene".

"INCONGRUENCIAS DE LA JUNTA". El escrito de los ecologistas expone la incongruencia del gestor del Parque Nacional, la Junta de Castilla y León, que es también la promotora de las obras. El daño causado por éstas reflejaría falta de sensibilidad en estas actuaciones, que no concuerdan con los principios que animaron a la creación de este parque nacional.

"Las consecuencias de estas obras son políticas, al restar credibilidad a la gestión de la Junta; legales, por los vertidos de residuos asfálticos en un espacio protegido; paisajísticas, al afear esta entrada natural al Parque Nacional de Guadarrama; ecológicas, al promover el aumento de la intensidad de tráfico en una carretera donde es frecuente que sea cruzada por la fauna salvaje; y social, pues deja sin arbolado a los vecinos que transitan a diario por los paseos de la carretera tanto en bicicleta como andando", apuntan desde EA.

El escrito de Ecologistas en Acción de Segovia finaliza solicitando a la Junta la retirada del escombro procedente del asfalto fresado, incluido el utilizado para la construcción de bermas, y medidas correctoras en sus márgenes que eviten la pérdida de arbolado.