El presidente de Cáritas Española visitó  Segovia a conocer la realidad del trabajo de Cáritas Diocesana, para lo que mantuvo una serie de reuniones con los responsables de los distintos programas de acompañamiento que se sostienen en la provincia, y evocó su pasado militar como artillero y muñidor del trabajo de la Academia de Artillería durante su etapa al frente del MADOC en la última etapa de su carrera.

La actividad de Cáritas cobra mayor importancia en un complicado contexto socioeconómico marcado por la crisis y las consecuencias de la pandemia ¿Cómo se está notando en su actividad ?

Estamos pendientes de recopilar los datos concretos paa la memoria de 2022, pero la crisis es algo que todos percibimos. La cesta de la compra sube, el precio de la vivienda también, el empleo cae... son problemas manifiestos que requieren repensar y trabajar en común con las administraciones.

Tenemos la ventaja de que en Cáritas no se nos cierra ninguna puerta, se nos escucha y tenemos un cierto reconocimiento. Colaboramos con iniciativas de toda índole y tenemos una red de una gran capilaridad, con 70 Cáritas Diocesanas y más de 6.000 Cáritas Parroquiales, lo cual supone un despliegue territorial inmenso.

También contamos con el apoyo de la Fundación Foessa, cuyos informes y el seguimiento que realizan de la evolución social nos dan una enorme credibilidad para valorar la situación social. 

¿Ha cambiado mucho el perfil de las personas que demandan ayuda o acompañamiento en Cáritas?

Las situaciones sociales se han ido complicando fruto de una crisis económica muy fuerte y una pandemia que nos ha machacaodo, lo que hace más dificil entender y asumir las nuevas demandas que nos llegan. Nuestros técnicos son quienes delimitan y detectan esas nuevas situaciones fruto del desempleo o la desigualdad, y orientan sus actuaciones a prestar servicios con más pasión y más ilusión a las personas más vulnerables.

Este año está plagado de citas electorales en ayuntamientos, comunidades autónomas y a final de año elecciones generales. ¿Cual va a ser el papel que jugará Cáritas para hacer valer los postulados de la Doctrina Social de la Iglesia?

En Cáritas queremos contribuir a mantener un diálogo fluído con los responsables políticos. Estamos presentes con propuestas políticas que trasladamos a los partidos para que, en lo posible, las puedan tener en cuenta en sus programas electorales; y van desde políticas de vivienda, empleo, o apoyo a la inmigración. Tratamos de que las propuestas puedan impulsar cambios legislativos, por lo que consideramos  necesario llevar nuestra voz al ámbito político desde la experiencia de la atención a los demás.

Pese a que la sociedad española ha demostrado ser solidaria, las organizaciones detectan el descenso en el número de socios y de sus aportaciones, así como en el de donantes. ¿Qué se puede hacer para atraer a nuevos socios y colaboradores?

No cabe duda que el problema que usted plantea es un problema general de todos. Si bien es cierto que existe una revitalización de las aportaciones a través de la 'equis' de la Declaración de la Renta, no es enos cierto que Cáritas no debe vivir de lo que nos da el IRPF y necesitamos el apoyo de nuestra gente. Hemos vivido una época muy rica del asociacionismo, con un incremento de la participación, pero eso tiene que traducirseen nuevos socios y nuevos donantes.

La clave es contar bien lo que hacemos, que es algo que se nos echa mucho en cara, y hemos repensado mucho sobre este asunto, lo que nos ha llevado a realizar una auditoría de marca que nos ha dado las pautas para poder mandar un mensaje claro a la sociedad.

También necesitamos que nuestro perfil de donante vaya cambiando, Nuestros donantes clásicos eran de los de Cáritas 'de toda la vida' y ahora necesitamos colocar a los futuros socios y donantes acciones concretas en las que sientan que puedan estar vinculados, desde un programa de empleo a un curso de infancia, porque es algo que mueve más allá de la generalidad. 

Por otra parte, nos preocupa nuestra extensión en la realidad del medio rural, donde es difícil acceder a pequeñas parroquias y conseguir involucrar a las comunidades en esta labor, así como mejorar la preparación caritativa de los sacerdotes en los seminarios, con el fin de que cuando se incorporen a las parroquias puedan entender y asumir la acción social y de acompañamiento que desde Cáritas se propugna.

En lo más inmediato, la respuesta solidaria a la tragedia del terremoto de Turquía y Siria está siendo muy significativa en Cáritas Española. ¿Cómo se está organizando la ayuda que llega a las zonas afectadas?

Cáritas está siempre presente en cualquier emergencia, y en estas circunstancias aún más. Nuestra aportación se realiza siempre en colaboración con las Cáritas locales, no enviamos contingentes ni voluntarios fuera de su ámbito. Les enviamos ayuda económica tal y como ellos nos solicitan para cubrir sus necesidades, y estamos alcanzando cifras muy importantes que ellos mismos gestionan no sólo para cubrir las necesidades más básicas, sino como incentivo a la reactivación económica de estas zonas.

De nuevo en Segovia, ciudad a la que llegó como cadete en la Academia de Artillería y a la que regresó en varias ocasiones en sus distintas responsabilidades vinculadas a la formación militar ¿Qué recuerdo conserva de Segovia?

Tenía mucha ilusión por visitar Segovia, es mi ciudad de referencia en la que me he formado profesionalmente y he contribuido a que la Academia siga estando donde está. Ahora Segovia sigue siendo referencia, pero en esta ocasión por el trabajo que desarrolla Cáritas Diocesana, tanto por los proyectos que desarrolla como por la situación en la que vive. Siempre es un placer volver a una ciudad que mantiene vivo y alto el espíritu solidario y acogedor de la que siempre ha hecho gala.