"Los barrios no deben verse obligados a meter en Presupuestos Participativos actuaciones que son propias del mantenimiento ordinario del Ayuntamiento", lamentaba el domingo la candidata de Cs a la Alcaldía de Segovia, Noemí Otero. Lo dijo durante visita al barrio incorporado de Madrona, en la que estuvo acompañada por José Antonio Manrique y Javier Ayuso, números 5 y 12 de su candidatura, respectivamente.
Otero criticó que "el olvido descarado del PSOE a lo largo de 20 años a los barrios incorporados ha llevado a los vecinos a exigir arreglos ordinarios o mejora de los servicios básicos a través de los Presupuestos Participativos". "La realidad es que esta herramienta debería ir encaminada a aumentar o implementar servicios e infraestructuras a las ya existentes, pero nunca a desarrollar el mantenimiento ordinario en estos núcleos de población", añadió. De lo contrario, "de esta manera, se crea una rivalidad innecesaria entre barrios".
"Los vecinos de Madrona lamentan que sus reivindicaciones son las mismas desde hace décadas porque nunca las ven satisfechas", prosiguió Otero, que afeó "los parches y remiendos que se hacen por parte del Ayuntamiento". "En lugar de hacer una intervención grande, hacen pequeñas actuaciones solo cuando hay averías", haciendo referencia, entre otras, a los recurrentes reventones de las tuberías de fibrocemento.
"Prueba de ello es que en el último año han intervenido 17 veces en una misma calle por roturas en la tubería de fibrocemento, es una vergüenza", remarcó. La candidata de la formación naranja calificó de "lamentable" que alrededor del 60-70% de las tuberías de los barrios incorporados aún sean de fibrocemento.
Asimismo, destacó que otra de las reivindicaciones más que necesarias de los vecinos de Madrona pasa por cubrir, al menos, alguna de las pistas de tenis para poder utilizarlas tanto en verano como en invierno o con climatología adversa. "Hay que estar al lado del vecino, escucharles para conocer la situación y poder dar solución a los problemas", incidió Otero, quien apostilló que "si no se pisan los barrios incorporados en años, es imposible conocer cuál es la realidad de los vecinos de estos núcleos".