"Nunca los europeos comimos tan barato como entre 2000 y 2020"

Nacho Sáez
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El exministro de Trabajo e ingeniero agrónomo Manuel Pimentel inaugura el Congreso EMFI de la Fundación Caja Rural de Segovia.

Manuel Pimentel (segundo por la izquierda), este jueves en Segovia. - Foto: Diego Gómez/ Fundación Caja Rural de Segovia

El exministro Manuel Pimentel advierte que la escalada del coste de la cesta de la compra puede continuar y reivindica el derecho de los europeos a disfrutar de una alimentación  «variada, sana y a un precio razonable» y advirtió que la escalada del coste de la cesta de la compra. Este jueves inauguró en El Molino de la Venta el Congreso EMFI que organiza la Fundación Caja Rural de Segovia con una ponencia titulada 'La venganza del campo'. Por esta cita también pasarán a lo largo de las próximas semanas los economistas Juan Ramón Rallo y José Carlos Díez y la empresaria y conferenciante Pilar Jericó.

Pimentel analizó el desprecio al que, en su opinión, la sociedad ha sometido a agricultores, ganadores y pescadores. «Tiene un origen sociológico y antropológico, no es político. Es una cosa de sociología profunda. Gracias a la globalización y a la concentración de la distribución, los precios bajaron muchísimo y, así, desde 2000 a 2020, la alimentación fue baratísima. Nunca los europeos comimos tan barato. Eso hizo que la sociedad dejara de preocuparse por la alimentación, desapareció como problema. En ninguna encuesta, la alimentación aparecía como una preocupación. Si no nos preocupa, tampoco lo hacen los profesionales que la hacen y entonces se hicieron invisibles, la PAC se empezó a considerar como parásito y, cuando los nuevos valores de sostenibilidad -que son muy positivos- fueron tomando cuerpo en la sociedad, a los agricultores, ganaderos y pescadores se les consideró enemigos del medio ambiente y maltratadores animales. Esto hizo que todas las normas que se aprobaran limitaran o restringieran y siempre encarecieran la producción agraria. Por eso, una vez que la desglobalización ha comenzado los precios han subido con mucha fuerza», reflexionó en declaraciones a El Día de Segovia unas horas antes de su conferencia en el Congreso EMFI.

El que fuera ministro de Trabajo entre 1999 y 2000 ve ahora dos escenarios posibles. «Este proceso puede ser reversible por dos vías. Por las buenas, si somos entre todos, por consenso, somos capaces de entender que el campo es importante, o por las malas. Hace dos  años y medio el carro de la compra estaba en 125 euros y ahora está en 250. Cuando se ponga en 500 euros, ya nos preocuparemos», avisa este expolítico con formación como ingeniero agrónomo y experiencia y experiencia profesional en empresas del sector primario.

Tras las tractoradas espera que haya una mesa de negociación. «Y se apruebe en Europa la estrategia alimentaria en la que el eje de sostenibilidad -que es irrenunciable- se mantenga por supuesto pero también se tenga en cuenta el derecho a una dieta variada, sana y a un precio razonable», remarca.