La muerte del 'héroe de Tábara' revive la pesadilla del fuego

David Alonso
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Ángel Martín, cuya agónica huida del fuego le encumbró como un símbolo en Zamora, se convierte en la cuarta víctima mortal del incendio de Losacio

La muerte del ‘héroe de Tábara’ revive la pesadilla del fuego

Una pared de fuego, una retroexcavadora tratando desesperadamente de escapar y la huida agónica de un hombre con la ropa en llamas. La terrorífica secuencia de poco menos de un minuto de duración que inundó redes sociales y televisiones durante la peor ola de incendios que se recuerda ha tenido el peor de los finales. Otra vida más segada por las llamas. Y otra vez en Zamora. Ángel Martín, de 53, se convirtió este martes en la cuarta víctima mortal de un estío negro para Castilla y León, y en especial para la provincia zamorana. De allí descendía, allí vivía y allí murió el  ya conocido como 'héroe de Tábara', que, después de tres meses ingresado en el Hospital Río Hortega de Valladolid, no ha podido superar las lesiones provocadas por el fuego, que le dejaron quemaduras severas en el 80 por ciento de su cuerpo. 

La agónica huida de las llamas mientras trataba de abrir un cortafuegos que retrasara su entrada en el municipio le convirtieron en todo un símbolo de la lucha contra los incendios a nivel local, regional y nacional. Tras conocerse su fallecimiento se sucedieron los mensajes de condolencia de representantes políticos regionales y provinciales, así como la declaración de tres días de luto en Tábara (Zamora).

El nombre de Ángel Martín se une tristemente a los de Daniel Gullón Vara, Eugenio Ratón y Victoriano Antón Ratón, las, hasta ahora, tres víctimas mortales que el incendio de Losacio había dejado. Todos fallecieron a causa del mismo fuego, a escasos kilómetros de distancia y con una diferencia de pocas horas. Martín, casado, con una hija y natural de Bilbao aunque descendiente por parte materna de Tábara, llevaba décadas asentado en la localidad zamorana donde regentaba un almacén de material de construcción en el que disponía de la maquinaria con la que salió a hacer el cortafuegos cuando se vio sorprendido por las llamas.

Precisamente para este sábado, 29 de octubre, estaba previsto que se celebrará en Manzala del Barco, una jornada solidaria y de homenaje a Ángel Martín, pero que ha sido suspendida finalmente tras el fatal desenlace. Allegados a la familia de Martín indicaron a Efe que en la última semana había sufrido un empeoramiento en su evolución, que hasta entonces había sido positiva.

El peor de la historia

Casi 32.000 hectáreas arrasadas y cuatro muertos son los credenciales que presenta el fuego ocasionado la tarde del domingo 17 de julio en Losacio para ser considerado como el peor de toda la historia de España. Un incendio que durante sus primeras 48 horas estuvo fuera de toda capacidad de extinción, con un avance de las llamas nunca visto, llegando incluso a progresar en contra del viento. De hecho, cerca de 10.000 hectáreas se consumieron solo durante las primeras cuatro horas en activo. Es el equivalente a arrasar unos 2.500 campos de fútbol por hora. Una aberración de la naturaleza que obligó a desalojar a unas 6.000 personas de casi cuarenta municipios. «El incendio no se puede extinguir ahora mismo, solo podemos intentar frenar su avance». Así lo reconocía el director del Servicio de Defensa Natural, Ángel Sánchez, tras las primeras horas del fuego de Losacio.

Fueron precisamente las primeras 24 horas –las que van desde la última hora de la tarde del domingo 17 de julio, hasta la finales del lunes 18– donde se produjeron las muertes, o las heridas que causaron el fallecimiento posteriormente, de los cuatro hombres. Daniel Gullón Vara, un experimentado bombero forestal de 62 años, sorprendido por un cambio en la dirección del viento última hora de la tarde del 17 de julio; Victoriano Antón, de 68, fallecía a primera hora del 18 de julio cuando trataba de salvar a su rebaño de las llamas; y Eugenio Ratón, pariente de este último, lo hacía casi un mes después, tras no poder superar tampoco las lesiones provocadas por las llamas. Una lista  negra a la que ahora hay que sumar a Ángel Martín.

Oleada de muestras de condolencia 

La muerte de Ángel Martín ha dejado un reguero de condolencias, mensajes de afecto y de apoyo para la familia y los amigos del fallecido desde el ámbito político e institucional de Castilla y León. De hecho, el Pleno de las Cortes estuvo plagado de mensajes de los portavoces parlamentarios y del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, en recuerdo y homenaje a la cuarta víctima mortal de los incendios. En concreto, el presidente de la Junta inició su primera intervención en el Pleno trasladando su pésame a la viuda de Ángel Martín y al resto de su familia y Amigos. «Ángel fue un ejemplo fue un ejemplo para todos nosotros, vamos a hacer todo lo que esté en nuestra manos para que en el futuro no haya situaciones de esta naturaleza». Tudanca también comenzó su intervención en la Cámara con un recuerdo para el fallecido. «Debemos intentar entre todos que esto no vuelva a pasar, que nunca volvamos a ver nuestra tierra calcinada», zanjó.

Igualmente, el portavoz de UPL-Soria Ya, Luis Mariano Santos, se refirió al fallecido en la argumentación de su pregunta al presidente ante el Pleno, algo que también hizo el miembro del Grupo Mixto, Pablo Fernández (Unidas Podemos). En su cuenta de Twitter, el vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, mostró su reconocimiento y respeto a Ángel Martín,  a quien se refirió como un «ejemplo de valentía y de amor a su pueblo».

Por otra parte, el Ayuntamiento de Tábara (Zamora) decretó tres días de luto oficial por la muerte de su vecino. La institución publicó un bando en el que anunciaba los días de luto como «testimonio del dolor de Tábara» y como gesto hacia la familia del fallecido, que murió, a los 53 años, después de intentar defender el pueblo del avance de las llamas. Además, el comunicado oficial del Ayuntamiento  señala que el luto incluye la suspensión de los actos festivos previstos en el pueblo para este fin de semana.