César Tolosa Tribiño, elegido por los miembros del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) por unanimidad para ocupar uno de los sillones del Tribunal Constitucional, es natural de Santa María la Real de Nieva (1957), localidad segoviana a la que suele seguir acudiendo esporádicamente, de donde procede también su esposa, María José Escorial Yuste.
Según ha señalado la alcaldesa del municipio, Pilar Ares, aunque su permanencia en Santa María no fue larga, aún residen en la villa algunos familiares del matrimonio, dándose la circunstancia que tanto el segundo apellido del magistrado, Tribiño, como los Escorial y Yuste están muy vinculados a la comarca. De hecho, María PilarTribiño, titular de la farmacia de la localidad, es prima de Tolosa.
Un vecino de Santa María, que ha pedido permanecer en el anonimato, ha conocido desde niño al nuevo magistrado del Constitucional, con el que mantiene amistad desde hace más de cincuenta años, incluso desde posiciones políticas diferentes en algunos casos. Le define «como una persona muy cariñosa, abierta, cercana, amigo de sus amigos y campechano, que no ha cambiado desde que le conozco, pese a haber ostentado altos cargos en la judicatura».
Recuerda que se fue muy joven de la villa, donde residía con sus padres, pero que no ha perdido contacto y acude cuando la es posible, sin faltar a las fiestas en honor de la Virgen de la Soterraña, en cuyo honor se celebra el 'Ofrecimiento de los cirios', la segunda semana de septiembre, incluso no descarta que pueda pasar el fin de año en Santa María, donde el matrimonio tiene un pequeño chalé, aunque otras veces ocupan un caserío de Escorial en una de las entidades locales menores próximas. Hasta su elección por unanimidad, a propuesta de los magistrados conservadores del CGPJ, César Tolosa llevaba desde 2014 en el Tribunal Supremo y actualmente, desde 2020, es el presidente de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del alto tribunal.
Quien conoce a Tolosa insiste en que «trata con todo elmundo del pueblo y es muy agradable», aunque debido a sus cargos ha reducido su presencia.
Tolosa ingresó en la carrera judicial en 1982. Tuvo su primer destino en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Molina de Aragón (Guadalajara), y en 1984 ascendió a magistrado y fue destinado al Juzgado de Instrucción número 5 de Palma de Mallorca.
Según recoge su currículum, publicado en la web del Poder Judicial, ese mismo año ingresó en el Cuerpo de Magistrados de Trabajo y ejerció en la Magistratura número 1 de Santander hasta 1990. Posteriormente fue magistrado de la Sala Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria y, desde 1993, presidente de la Sala de lo Contencioso-Administrativo de ese mismo órgano judicial.
En 2004 fue elegido presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria, cargo en el que permaneció hasta su nombramiento para el Supremo. Autor de numerosas publicaciones científicas, es profesor de la Universidad de Cantabria desde 2009. Además, ha sido profesor en distintos cursos de Derecho Contencioso-Administrativo.
Durante los últimos meses, el magistrado ha criticado duramente «el secuestro» que los políticos han impuesto al Poder Judicial: «El órgano de gobierno de los jueces está sufriendo un injusto vaciamiento de sus competencias que excede en mucho a las potestades del poder político», ha informado '20 Minutos'. En una entrevista para el canal de la Universidad de Salamanca, donde cursó sus estudios, reconoció haber pasado en esta ciudad los mejores años de su vida. Asimismo defendió la transparencia de las instituciones, incluida la jurisdicional, argumentando que «los jueces tenemos que ser plenamente conscientes que estamos al servicio de la ciudadania».
Segovia, en la memoria de tres magistrados
En el Tribunal Constitucional, el recién designado César Tolosa se sentará con otros dos magistrados vinculados con Segovia, como son Cándido Conde-Pumpido Tourón, presidente de la Audiencia Provincial, desde 1985 a 1995, de quien se ha hablado para presidir la institución, para la que es candidata también María Luisa Balaguer, ambos los progresistas más antiguos, y Concepción Espejel, del sector conservador, magistrada del mismo tribunal que tiene su sede en la calle San Agustín, en la capital, desde 1995 a 1999. De ahí salió también el actual magistrado de la Sala Segunda del tribunal Supremo, Andrés Palomo, que presidió la Audiencia Provincial. desde 1998 hasta 2014.
Algunos próximos creen recordar que, nada más aprobar la oposición, Tolosa trabajó en un juzgado de la ciudad un verano, posiblemente en alguna sustitución. Curiosamente el apellido de la otra nueva magistrada del Constitucional es Segoviano, hasta ahora presidenta de Sala en el Supremo.