Que la sangría demográfica de Segovia sólo puede conducir a una pérdida constante de vida en sus municipios es obvio, pero da vértigo ver cómo ya son más las viviendas de la provincia calificadas como 'no principales' (de uso secundario o directamente vacías) que las 'principales' (habitadas como primera residencia, y por tanto la mayor parte del año), según el Instituto Nacional de Estadística (INE). Es decir, que si uno llama a una puerta al azar, sobre todo en un día laborable de invierno en el medio rural, ya es más probable que nadie le abra, algo que sólo pasa en otras seis provincias de toda España. Y sólo tres (Ourense, Lugo y Ciudad Real) tienen una proporción mayor de casas vacías que Segovia.

El nuevo censo de población y viviendas del INE, publicado el 30 de junio con datos de 2021, pone cifras al desierto demográfico e inmobiliario segoviano y retrata cómo se ha extendido en una década; en concreto, desde el censo anterior a este último, datado en 2011. Entonces contabilizaba 59.829 viviendas calificadas como no principales (vacías o secundarias) que representaban un 48,21% de su parque inmobiliario, y ahora ese porcentaje se ha elevado al 50,6%, tras sumarse otras 5.073 y alcanzar las 64.902, mientras las viviendas principales han bajado de 64.257 a 63.353 (-904). De estas últimas, apunta que el 75,44% están habitadas en régimen de propiedad, dato que en 2011 estaba en el 78,59%; y el 13,93% en alquiler, frente a un 12,88% hace diez años; las que no están en propiedad o en alquiler, están en régimen de cesión o fórmulas parecidas.

El problema fundamental es evidente, dado que en ese intervalo de diez años la provincia perdió cerca de 10.000 habitantes (de 163.171 a 153.626, -9.545), propiciando ese descenso de más de 900 viviendas principales, al tiempo que decaía la media de personas que viven en cada casa (de 2,53 a 2,42). De hecho, los hogares segovianos con sólo una persona se han disparado un 24% (aumentan de 16.361 a 20.342) y ya representan casi un tercio del total de viviendas habitadas.

Segovia ya tiene más casas desocupadas que habitadas

Además, coincide que, a pesar de que la actividad constructiva se mantuvo en niveles bajos entre 2011 y 2021, han seguido siendo muchas más las viviendas que se levantaban que las que desaparecían por ruina o similar, de modo que el parque inmobiliario de la provincia, de un censo a otro, ha aumentado en 4.189 viviendas; de 124.086 a 128.255, según datos que, sin ser un redondeo, tampoco resultan exactos por ciertas variaciones metodológicas en el recuento que hace el INE.

Ese incremento de 4.189 viviendas, en cualquier caso, sumado a la citada pérdida de 904 principales, arroja una cifra de 5.193 que casi clava la del aumento de las viviendas no principales (5.073), afianzando la hipótesis de que la mayoría de lo que se ha construido ha propiciado que se ocupara una casa nueva a cambio de dejar otra vacía, o que se adquiriera como segunda residencia.

De hecho, el INE contabiliza un total de 4.628 viviendas construidas en los diez años analizados en el conjunto de la provincia, y añade que 2.121 (46%) se destinaron efectivamente a primera residencia, frente a 2.507 (54%) con uso secundario o deshabitadas.

Por otro lado, llaman la atención los datos relativos a la cantidad de casas que están completamente vacías. En el censo de 2011 se atribuían 18.964 a Segovia, y en el de 2021 casi el doble, 35.253. No obstante, el INE ha introducido un cambio metodológico importante, ya que antes se basaba en lo que recogía el agente censal que visitaba el edificio y ahora se analiza el consumo eléctrico, lo cual permite ser más preciso a la hora de deducir si una vivienda está deshabitada o no. Un detalle que contribuye a dar sentido al hecho de que el censo de 2011 reflejara 40.865 viviendas secundarias en Segovia, mientras que ahora lo que se puede consultar, por ejemplo, es que hay 28.684 (el 22,26% del parque inmobiliario) que registran cierto consumo eléctrico anual, pero no más del que hace falta de media para vivir allí entre 15 días y tres meses.

En este contexto, y centrados en el dato de casas vacías, donde ahora el INE incluye una parte de las que en 2011 aún consideraba secundarias, pasan de representar un 15,28% del parque inmobiliario de Segovia a un 27,48%, porcentaje que sitúa a esta provincia como la cuarta con el peor resultado, sólo por detrás de Ourense (43,73%), Lugo (37,32%) y Ciudad Real (29,11%), mientras la media nacional está en el 14,41% y la regional en el 19,70%.
Respecto al porcentaje de viviendas no principales, que no hay que olvidar que también incluye las vacías, Ávila registra el peor dato con un 59,42% de su parque inmobiliario, seguida de Teruel (56,64%) y Soria (54,93%); y después de las tres primeras, Cuenca (51,14%), Zamora (51,13%) y Ourense (51,02%), con las cuales ya está casi a la par Segovia (50,60%), que se sitúa séptima.

No en vano, sólo en 33 de los 209 municipios de Segovia son mayoría las viviendas que están ocupadas habitualmente, destacando ahí, cómo no, los pueblos del alfoz y la propia capital. Con San Cristóbal al frente (un 78,26% de viviendas principales frente a un 21,74% de secundarias o vacías), seguido de La Lastrilla (76,27%), Palazuelos (74,66%), Segovia (71,66%) y, cerrando el top-5, Hontanares (69,32%).

Cuéllar, con un 65,70% de viviendas principales, se mantiene dentro de ese grupo de 33, y a duras penas también San Ildefonso (52,10%).

En Segovia ciudad, entretanto, el parque inmobiliario ha crecido poco (de 28.994 a 29.036 viviendas, 142 más) y han bajado las viviendas vacías (de 4.972 a 4.678, 294 menos), pero aún más las principales (de 21.273 a 20.808, -465), que han pasado de representar un 73,62% al ya citado 71,66%, a la vez que de 2011 a 2021 se perdían 3.711 habitantes (de 54.945 a 51.234).

LOS PUEBLOS MÁS VACÍOS. Por el otro extremo, mientras, el desierto inmobiliario encuentra su máxima expresión en Aldehuela del Codonal, donde, con 122 viviendas en total, sólo se contabilizan 14 ocupadas de manera habitual, de modo que el porcentaje de vacías o secundarias se dispara al 88,52%. Asimismo, por encima del 80% están (citados de más a menos) Navares de las Cuevas, Ventosilla y Tejadilla, Cerezo de Arriba, Alconada de Maderuelo, Sequera del Fresno, Riofrío de Riaza, Aldeanueva de la Serrezuela, Torreadrada, Bercimuel, Orejana, Navares de Ayuso, Villaverde de Montejo, Moral de Hornuez, Castrojimeno, Valtiendas, Santo Tomé del Puerto, Ituero y Lama, Riaguas, Carabias, Navares de Enmedio, Aldealcorvo, Duruelo, Calabazas, Fresno, Monterrubio, Valleruela de Sepúlveda, Perosillo, Arcones, Aldehorno, Castroserna de Abajo, Languilla y Gallegos.

Tampoco se libra de estar en ese grupo El Espinar, que pese a haber ganado población residente sólo tiene cuatro de cada diez viviendas (40,54%) ocupadas de manera habitual. Y es que allí el parque inmobiliario aumentó en 510 viviendas (de 9.040 a 9.550), pero sólo en 268 las que se usan como primeras residencias (de 3.604 a 3.872), mientras las vacías ascendían a 2.284 (23,91%).