El último adiós a Miguel 'Dalia Everest'

Nacho Sáez
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Amigos y compañeros recuerdan la trayectoria de Miguel Ángel González Marinas, fallecido esta semana.

El último adiós a Miguel 'Dalia Everest'

La 'cena del Miguelín' se celebra cada año en las horas previas a la Media Maratón de Segovia y sirve para reconocer la trayectoria de algún atleta popular destacado por su capacidad de superación. Su nombre se lo debe a otro atleta popular también inquieto, amante del deporte y ejemplo de compañerismo. Miguel Ángel González Marinas, fallecido este jueves a los 77 años de edad, fue un pionero dentro del deporte segoviano, tal y como recuerdan quienes coincidieron con él a lo largo de las últimas décadas.

Su figura se puede glosar desde el atletismo, el triatlón, la natación, el esquí o el socorrismo. Todas esas disciplinas practicó a pesar de ser un sacrificado pequeño comerciante. «Él era atleta, pero le picó el gusanillo del triatlón y fue de los primeros que lo practicó en Segovia», recuerda el triatleta Juan Rojo, un veinteañero cuando ingresó en el club Adal, donde Fernando Useros, Juan Pedro Aragoneses, Pedro Elías, Cristina Costa o Miguel daban el impulso inicial a un deporte que ahora cuenta con decenas de miles de federados en toda España. «Entonces el triatlón se consideraba una locura y las pruebas eran como de aventura. Pero fueron buenos tiempos. Miguel y yo compartíamos coche uno o dos días a la semana para ir a entrenar a la piscina cubierta de Ávila porque en Segovia todavía no había», cuenta Rojo.

Ninguna limitación frenaba a Miguel en su afán por explorar nuevos caminos. Corrió la primera edición de la Maratón Popular de Madrid y las 24 siguientes. Fue el único segoviano que lo hizo. De aquello han  sobrevivido algunas anécdotas deliciosas. «A la Maratón Popular de Segovia íbamos un grupo de corredores populares de Segovia y el que se quedó encargado de rellenar las inscripciones, al hacerlo, no se acordaba de los apellidos de Miguel, y le inscribió como MIguel Dalia Everest», relata el atleta popular y 'speaker' en numerosas carreras de la provincia Luis Cuesta.

El último adiós a Miguel 'Dalia Everest'El último adiós a Miguel 'Dalia Everest'

'Dalia' y 'Everest' han sido el corazón y los pulmones de Miguel con el permiso de su mujer, Imaculada, y de sus hijos, María y Miguel. Descendiente de comerciantes, continuó junto a sus hermanos la tradición y abrió y regentó la emblemática tienda de deportes 'Everest', en la Calle Real, en la esquina junto a la antigua bibilioteca pública, y los también icónicos establecimientos textiles 'La Dalia'. Estos se convirtieron en un símbolo de la pujanza económica del barrio de Santa Eulalia, aunque también tuvieron una etapa en la bulliciosa Calle Real.

Los esclavos horarios del comercio no fueron impedimento para que Miguel diera rienda suelta a su pasión por el deporte. «Fue atleta del Blume. Corrió maratones, en pista, croses...», evoca el exdelegado provincial de Atletismo y técnico de Deportes de la Diputación Provincial de Segovia Chema del Prisco. «Era una gran persona. Intentaba ayudar a todo el mundo y siempre estaba dando ideas para realizar actividades. Cuando entré en la Diputación hace 35 años él estaba metido en el tema de natación y se implicó en crear los programas para monitores, socorristas...», añade Del Prisco.

El mundo del socorrismo es de los que más ha llorado su muerte. «Miguel ya tenía una participación activa en la natación segoviana, pero fue en 1980 cuando el doctor Alfredo Garcillán, entonces delegado de la Federación de Socorrismo en Segovia, animó a un grupo de jóvenes socorristas a formarse como profesores de socorrismo y continuar su labor», apunta el director técnico-docente de la Escuela Segoviana de Socorrismo, Luis Miguel Pascual. En los 15 años siguientes Miguel compartió con Paloma Sanz y Luis Miguel Pascual las labores de formación de los socorristas segovianos y la promoción del socorrismo deportivo infantil y en 1995, a raíz de los conflictos surgidos por la formación de una federación autonómica, Miguel lideró la creación de la Escuela Segoviana de Socorrismo (ESS) enfocada a la formación del socorrista como profesional cualificado y no como deportista.

El último adiós a Miguel 'Dalia Everest'El último adiós a Miguel 'Dalia Everest'

«Suyo fue el mérito de saber aglutinar alrededor de la ESS a un gran equipo de personas, sanitarios, psicólogos y técnicos que han estado en lo más alto del socorrismo con un gran prestigio nacional desde entonces, con una larga lista de publicaciones y aportaciones técnicas de gran calidad», remarca Pascual. En 1997 participó en la organización del primer congreso de socorrismo de ámbito nacional -que se celebró en Segovia- y en 2005 puso en marcha el innovador programa 'Socorrismo en la Cárcel, que durante varios veranos proporcionó formación en natación y socorrismo a los internos de la cárcel de Perogordo.

El último adiós a Miguel 'Dalia Everest'
El último adiós a Miguel 'Dalia Everest'

«Todos debemos hacer un homenaje a este hombre», señala José Palacios, presidente de la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (Adeac), organización responsable en España de conceder la 'bandera azul', que distingue a las playas y zonas de baño que cumplen una serie de criterios ambientales, educativos, de seguridad y de accesibilidad . «Le conocí en el año 91 o 92. Yo entonces era el director de la Escuela Nacional de Salvamento y Socorrismo y estábamos actualizando a socorristas de toda España. Luismi y él demostraron un nivel profesional y humano increíble. Después estuvimos trabajando juntos en actividades organizadas en Segovia y la experiencia siempre fue muy positiva. Siempre dispuesto a ayudar y a que las cosas salieran bien. Le voy a tener en el recuerdo siempre». Miguel deja una profunda huella también entre los que han practicado el esquí, ya que fue miembro de la antigua Deportiva Alpina.