Y el trono vuela

David Matarranz
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Relato en primera persona de las 24 horas de un cofrade del Cristo del Mercado regado de mucha ilusión, incertidumbre y euforia

El trono, a su llegada al Azoguejo - Foto: DS

20:30 H. MIÉRCOLES SANTO                        

La Cuadrilla del Cristo del Mercado es convocada en la Ermita. Hay que subir al templo el trono procesional para los preparativos para la procesión. El trono está en un local del barrio que un vecino les ha cedido durante las semanas previas de ensayos. Tras subir el trono, miembros de la propia cuadrilla junto con los directivos comienzan con el montaje de cara a la procesión del Jueves Santo. Lo primero instalar la imagen titular en una maniobra que requiere cuidados y destreza. Nadie lo menciona, pero en el ambiente se respira cierta decepción, pues las previsiones meteorológicas no son optimistas. Dan agua desde la siete de la tarde, coincidiendo con el horario de procesión. Pero se sigue trabajando pues se apurarán todas las posibilidades.

8:00 H. JUEVES SANTO

Llegan a la ermita los primeros cofrades para empezar con el adorno floral. Se espera la llegada de Javier de Andrés, es el propietario de una floristería del barrio. En los últimos años es el responsable del exorno floral. Este año se recupera la alfombra de claveles rojos a los pies de la imagen del Cristo, con remates de orquídeas. Es un proceso laborioso, pues hay que introducir el clavel uno a uno en una malla hecha a medida para el trono bajo la talla. Las previsiones no mejoran, pero se sigue trabajando.

10:30 H. JUEVES SANTO

La Junta directiva del Cristo del Mercado comienza a valorar la posibilidad de adelantar la hora de salida a las 5 de la tarde, y aprovechar que las previsiones del tiempo no dan lluvia hasta las 9 de la noche. Ese intervalo es suficiente para hacer la Estación de Penitencia hasta la Catedral. Se habla con la Junta de Cofradías, que tras dar el visto bueno, informa que otras cofradías están valorando acciones similares.

11:00 H. JUEVES SANTO

Se decide adelantar la salida a las cinco de la tarde. La maquinaria se pone en marcha. Lo primero informar a los cofrades del nuevo horario. Para ello las redes sociales y los medios de comunicación cobran especial protagonismo. El ambiente de tristeza se transforma en ilusión ante la posibilidad cierta de salir en procesión. Todo el trabajo y los preparativos no serán en balde.

13:00 H. JUEVES SANTO

Las puertas de la Ermita se cierran hasta la procesión. Los días previos ha hecho mal tiempo y el sol de Jueves Santo anima a visitar la Ermita a muchos los vecinos del barrio que aprovechan para rezar ante su imagen o simplemente a ver como ha quedado el paso tras los preparativos. La actividad se concentra en la charla con vecinos o la compra de algún recuerdo de la Cofradía. Se palpa a ilusión por ver de nuevo al Cristo del Mercado por las calles.

16:00 H. JUEVES SANTO

Comienzan a llegar los músicos de la banda, los cargadores, mantillas y penitentes para salir en procesión. Es el momento de organizar el cortejo con el reparto de insignias. Los cargadores aprovechan para enfajarse y vestirse en el interior de la Ermita. Es un momento íntimo y de compañerismo. Se ayudan unos a otros para estar listos. Son momentos de mariposas en el estómago y de responsabilidad. Más tarde llega el Hermano Mayor de este año, Alberto Marcos. Es un cargo honorífico que se recibe por antigüedad y pese a vivir en Melilla, no duda en acudir a la cita acompañado de su familia. El nombramiento le permite acompañar a la imagen titular en la presidencia portando vara. Llega también el Teniente Coronel Jefe de la Comandancia de la Guardia Civil  de Segovia  Benito  Donante  Corceles. La Comandancia de Segovia es Hermano Mayor Honorífico desde 1967.  Un año más, tampoco faltará la escolta de la Guardia Civil al Cristo de las faldillas, en el que es un pequeño homenaje al benemérito cuerpo, de un barrio acostumbrado a convivir con sus miembros en el día a día.

17:00 H. JUEVES SANTO

Tras unas palabras de ánimo y reconocimiento del presidente, José Germán de Lara, y una oración dirigida por el párroco, Jesús Riaza, se abren las puertas de la Ermita. Hay mucha gente en la Plaza, pero menos que otros años. El nuevo horario resta público, pero los que están viven con emoción el toque de la Marcha Real para recibir al Santo Cristo en la calle. Llega uno de los momentos más intensos, la bajada de las escaleras de la Ermita con el trono.  Este año, Antonio Sanz se estrena como nuevo capataz dirigiendo la cuadrilla, pero se ha decidido que sea Ángel Rubio, el capataz hasta el año pasado quien dirija la maniobra a modo de homenaje. El trono ya está en el suelo. El nuevo capataz toma el mando tras regalar un martillo de plata a su antecesor a modo de recuerdo de toda la cuadrilla. Se reconoce así el trabajo altruista y el empeño de Ángel Rubio, que tuvo el gran valor de dirigir una cuadrilla desde la nada hace 12 años. La banda de tambores y el grupo de dulzainas Los Alijares comienzan a tocar las marchas que pondrán el acompañamiento musical a la procesión. La salida del barrio es un momento especial. Bajo los varales se identifican a personas que han residido siempre en el Cristo del Mercado y despiden con emoción a la imagen, especialmente por parte de personas mayores que ya no tienen fuerzas para acompañar como antaño al cortejo hasta la Catedral.  

19:00 H. JUEVES SANTO

La procesión llega a la calle San Francisco. Está pasando por el Azoguejo la Cofradía de Maristas que también ha adelantado su salida, pero en esta ocasión ha prescindido de los cargadores, para portar sus imágenes con ruedas. Este año hay que tener paciencia, pues todo se ha improvisado. Después de dejar pasar a la Soledad Dolorosa, iniciamos el camino para llegar al Azoguejo. En ese momento se perciben las primeras gotas de lluvia y se abren paraguas en el público. Es un momento de nervios, en el que hay que tomar decisiones. Rápidamente se decide subir a la mayor velocidad posible a la Catedral. La banda toca a paso 'mudá', a ritmo alto y ya sin marchas. Los cargadores ponen un ritmo que les permite alcanzar la Catedral en menos de 20 minutos, con solo dos paradas. El trono parece que no pesa y vuela por el centro de Segovia. Por el camino cae una petalada desde los balcones de Casa Duque y suenan los aplausos y ánimos del público que observa el esfuerzo de la cuadrilla para resguardar su imagen lo antes posible.

19:30 H. JUEVES SANTO

Ya en el interior de la Catedral,  la cuadrilla espera órdenes para colocar el trono sobre el carro con ruedas con el que posesionará en la Procesión de los Pasos. Hay satisfacción porque la imagen y el trono apenas se han mojado. La estrechez de la Calle Real ha protegido de una lluvia que venía tirada. Los nervios surgen cuando se conoce que muchas personas del cortejo procesional no les han permitido el acceso a la seo porque se están celebrando los Oficios.  Niños, penitentes, músicos y mantillas esperan en la puerta o buscan refugio en los soportales de la Plaza Mayor. Será una de las polémicas de la jornada.

22:00 H. JUEVES SANTO

La cuadrilla de cargadores y directivos se reúnen en la tradicional cena tras la procesión del Jueves Santo. A esa hora deberían estar llegando a la Catedral, pero los cambios horarios, también adelantan la reunión. Es el momento de comentar los detalles y anécdotas de la jornada. Se comparten fotos y vídeos. Se palpa en el ambiente cierta euforia porque todo ha salido bien, y un año más los cofrades del Cristo del Mercado han podido realizar su Estación de Penitencia hasta la Catedral. Toca esperar a las previsiones del tiempo para la Procesión de los Pasos. Pero mañana será otro día…