Solo han sido cuatro las ferias programadas este año en la avenida del Acueducto: la Feria Nacional de Artesanía de Segovia, que alcanzó su 42ª edición del 29 de abril al 7 de mayo; la XXVIFeria Internacional de la Mujer Rural, PRONATURA, que se celebró del 15 al 17 de septiembre, y dos todavía pendientes, la XXX Feria del Libro Antiguo y de Ocasión de Segovia, que se celebrará entre el 10 y el 26 del próximo noviembre, y la XXIX Feria Internacional de Cerámica y Alfarería de Segovia, que cerrará el ciclo durante el puente de la Constitución, del 6 al 10 de diciembre.
Los colectivos que organizan estas ferias, todas ellas con una larga trayectoria, pero también artesanos que han participado en ellas, no quieren moverse de esta céntrica avenida a pesar del anuncio del gobierno municipal de que desde el 1 de enero todos los eventos de estas características se celebrarán en el paseo del Salón de Isabel II, también céntrico pero donde los afectados ven muchos inconvenientes y pocas ventajas.
El principal inconveniente es que El Salón, como se conoce popularmente en Segovia a este parque ajardinado, «no es lugar de paso», que «está apartado» y los expositores quieren resultados económicos.
«Si nos obligan a irnos de la avenida del Acueducto, la de diciembre – por la feria de Cerámica y Alfarería – será la última. Lo tenemos muy claro». Así de contundente se muestra Emilio Carrasco, uno de los responsables de COCERSE, el Colectivo de Ceramistas de Segovia.
Carrasco, además, es vicepresidente del Gremio Artesanal de Segovia (Gremiarse) y hace extensivo el «plantón» a la Feria Nacional de Artesanía, la primera en el calendario que se enfrentaría a este dilema.
Cuenta que lo de celebrar la feria en El Salón «ya lo probamos en su día y no funcionó, fue un fracaso absoluto». «Nosotros no somos comerciantes, somos artesanos y necesitamos un sitio donde se nos vea, donde hemos estado de toda la vida, porque ya junto al Acueducto hubo una feria de la cacharrería en 1902», añade.
Juana Borrego, presidenta de FEMUR, la Federación Nacional de la Mujer Rural que organiza la feria PRONATURA con mujeres artesanas del medio rural, solo se aviene a celebrar alguna de la actividades paralelas, como una presentación, por ejemplo, en el paseo del Salón pero, después de una experiencia de casi treinta años, con ediciones en lugares como la Plaza Mayor o el propio Salón, coincide con que los productos artesanos, y en el caso de su feria muchos de ellos alimentarios, donde mejor se ven y donde mejor se puede hacer acopio de ellos es en la avenida del Acueducto. «No es lo mismo tomar unas cervezas que comprar productos artesanos y luego llevar el peso por media ciudad. Los accesos no son los mismos aunque se construya una escalera mecánica o se use el ascensor para ir a la Calle Real», comenta.
Insiste Borrego en que la avenida del Acueducto es cómoda, llana, bien comunicada con transporte público y aparcamientos cercanos, mientras «el paseo del Salón es un lugar muy bonito para pasear y donde la gente puede estar un ratito hablando pero no acoger a centenares de personas, porque es mucha la gente que asiste a nuestras ferias».
Algo en lo que coinciden tanto desde el Gremio de Artesanos como desde FEMUR es en que han sondeado con encuestas propias a los artesanos y artesanas de otros lugares pero que ya conocen Segovia de otras ediciones y no quieren cambiar la ubicación e incluso dicen que no vendrán a la ciudad si no van a estar en un lugar de paso con tanto atractivo para visitantes o turistas como el entorno del Acueducto.
«Esconder las ferias no tiene sentido», afirma Manuel Gómez, presidente de la Asociación de Libreros de Viejo y Antiguo de Castilla y León (ALVACAL), un librero de Segovia que llama la atención sobre la oposición de las ferias con más tradición en la ciudad a un cambio que no considera factible para quienes participan en estos eventos. Así se lo transmitirá a los responsables municipales que asistan a la inauguración de la Feria de Libro Antiguo y de Ocasión el 10 de noviembre.
Desde los colectivos organizadores hacen valer que en la actualidad son únicamente cuatro las ferias «con solera» que tienen lugar en la avenida del Acueducto, teniendo en cuenta que la del libro no se celebra desde 2019, por lo que entienden que no representan un grave conflicto para los hosteleros de la zona, por ejemplo, aunque algunas puedan coincidir con fechas claves para el sector como la Semana Santa.
Posición del alcalde. El alcalde de la ciudad, José Mazarías, insistía esta semana en que el cambio no tiene vuelta atrás y que se produce porque el paseo del Salón es un espacio «muy agradable y tranquilo para la estancia de los ciudadanos que pueden pasear sin ningún peligro, sin ningún tipo de tráfico».
Recalca Mazarías la seguridad del emplazamiento para las personas pero también el éxito de la feria de cerveza que organiza la FES en colaboración con el Ayuntamiento a finales de septiembre y principios de octubre, OktoberFES, un éxito de público demostrado. Desde las ferias 'veteranas' replican que es un evento que nada tiene que ver con el concepto de sus ferias.
El Ayuntamiento tiene una prueba de fuego con el próximo Mercado Navideño, que organiza directamente, y el regidor segoviano asegura que será la oportunidad para demostrar que es el lugar más indicado para la celebración de ferias.