El mercado laboral segoviano anota la segunda tasa más baja de desempleo de España en el segundo trimestre del año, con un 6,51% tan sólo por detrás de Gipuzkoa (6,64 %). Además, la provincia se sitúa en el cuarto puesto más alto en lo que respecta a la tasa de empleo de la población, con un (57,22%) adelantada por las Islas Baleares (60,36 %), Guadalajara (58,64 %) y Madrid (57,36 %); y ocupa el séptimo puesto en mayor tasa de actividad, por detrás de las Islas Baleares, Guadalajara, Madrid, Barcelona, Almería y Ceuta.
En lo que respecta al mes de julio, el número de parados se situó en 5.090, 35 menos que en el mes de junio, lo que representa una bajada del 0,68 por ciento. Además, en comparación con el mes de julio de 2022, el número de demandantes de empleo inscritos como tal se ha reducido en un 8,52 por ciento.
El paro registrado en el séptimo mes del año se divide entre 2.055 hombres y 3.035 mujeres. En cuanto a grupos de edad, son 324 los menores de 25 años demandantes de empleo, 1.798 aquellos entre 25 y 44 años, y la cifra asciende hasta los 2.968 en los mayores de 45 años.
El sector servicios es el que más parados aglutina según los datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), con 3.644 desempleados. Le sigue el grupo de demandantes de empleo sin un trabajo anterior, con 517; la industria, con 231 parados y el sector de la construcción, con 320 desempleados. La agricultura es la actividad económica que menos demandantes de empleo recoge, con 278.
Haciendo una evolución de todo este año, las cifras no dejan lugar a dudas: la situación va a mejor y poco a poco se van reduciendo las cifras de paro en la provincia. En enero eran 6.099 los desempleados, en febrero pasaron a ser 6.041 y en marzo 6.000. La cifra se redujo a 5.500 en abril y a 5.335 en mayo. El desplome continuaba en junio con 5.125 personas en paro y a 5.090 en julio.
Además, teniendo en cuenta los datos del mes de julio, en comparación con el mismo mes de otros años, los números también son positivos, siendo el séptimo mes de 2023 el que menos desempleados registra desde hace diez años en el mismo periodo, con 5.090. En julio de 2022 la cifra de demandantes de empleo era de 5.564. Durante los años de la pandemia sanitaria por la Covid-19 las cifras de paro se dispararon, contabilizando en el mismo mes de 2021, 7.159 personas inscritas en el paro y 7.720 en julio de 2020.
Algo más bajo era el número en el mes de verano de 2019, con 6.050 desempleados. 6.335 se registraban ese mismo periodo en 2018. En 2017 la cifra era de 7.178; ascendía a 8.291 en 2016, a 9.426 en 2015, a 10.989 en 2014 y a 12.118 en 2013.
A pesar de esto, el presidente de la Federación Empresarial Segoviana, Andrés Ortega, apunta que a pesar de que los datos en Segovia arrojan cifras positivas, «hay que mantener la prudencia ante el impacto que tendrá la posible ralentización del crecimiento de la economía en el mercado laboral en los próximos meses». Aún así, revela la esperanza de bajar de la barrera de los 5.000 desempleados en la provincia. «Confiamos en ello, pero hay que tener en cuenta la ralentización», señala.
Además, revela que a pesar de los más de 5.000 parados que se registran en Segovia, hay preocupación por la dificultad en la contratación. «Seguimos buscando trabajadores para sobre todo para el sector servicios y la industria». Opinión que comparte el presidente de la Asociación de Alojamiento, Hostelería y Turismo de Segovia, Jesús Castellanos. «Nosotros damos trabajo a todo el que quiera trabajar. En hostelería siempre hay trabajo, pero hay una gran falta de empleados».
En lo que respecta al número de afiliados a la Seguridad Social, según el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, es de 67.087, siendo el sector servicios el que ha generado un mayor índice de empleo. Esto supone un aumento en las afiliaciones, con 1.995 trabajadores más.
Comparación. Las cifras registradas en el mes de julio en Segovia contrarrestan las de Castilla y León, donde el número de desempleados aumentó el julio en 83 personas, lo que supone un incremento del 0,08 % sobre el mes de junio, frente al descenso del 0,41 % registrado a nivel nacional, donde el paro se redujo en 10.968 personas hasta los 2,68 millones, la cifra más baja registrada en el mes de julio desde 2008.
Ante este escenario, la Confederación Española de Organizaciones Empresariales de Castilla y León prevé «una posible desaceleración económica en los próximos meses», por lo que reiteran la necesidad de «estimular la inversión como garantía de crecimiento y creación de empleo, para lo que resulta clave la estabilidad institucional y la seguridad jurídica que ofrezca certidumbre».