No hubo sorpresas ni cambios de guion en la constitución de la nueva corporación municipal de Ávila salida de los comicios del 28 de mayo pasado. La lista que presentó Por Ávila con Jesús Manuel Sánchez Cabrera fue la más votada al conseguir 11 ediles de 25, seguido de los 7 del PP, los cuatro del PSOE y los tres de Vox, y fue él quien resultó elegido por mayoría simple de nuevo alcalde de Ávila.

Repetirá por tanto cometido en una legislatura que apuntó será continuista con el trabajo ya hecho y que se extenderá desde este 2023 y hasta 2027. En su discurso de investidura aseguró que su "hoja de ruta será sencillamente el programa electoral" con el que concurrieron a las elecciones. Lo materializará, como ya anunció hace tiempo desde el gobierno "en minoría" que tienen y que es el que han querido los abulenses, decía, pero también un "gobierno abierto, que tiende la mano a todos los grupos políticos municipales para alcanzar acuerdos".

Nada más comenzar su intervención aseguró que había cumplido lo que anunció públicamente: "Mi único pacto será con los abulenses".

Sin duda alguna, este va a ser un mandato marcado por el "diálogo", aventuraba, porque aseguró que "esto va de Ávila", "no de izquierdas ni de derechas". Por todo ello tendió la mano a todos. Y con todos aseguró que se había reunido en las semanas previas al Pleno en un ambiente de "buena fe, buena voluntad y ganas de trabajar". Ésa es la idea y todo para lograr acuerdos por el "interés y el bien común".

En el seno de esas reuniones ya se comenzó a preparar el pleno de organización de cara a la legislatura que ya ha echado a andar y que será este mismo jueves.

Con ello comienzan "cuatro años por delante de mucho trabajo al servicio de los abulenses" que estarán marcados por ese programa electoral con grandes retos que, en algunos casos, no son desconocidos. Puso sobre la mesa y comprometió el trabajo con "el futuro abastecimiento de agua para la ciudad" además de con el desarrollo del Plan Territorial de Fomento "tan importante para generar oportunidades" que permitan que "nuestros hijos y nietos puedan quedarse en Ávila" o seguir avanzando "en la mejora de la movilidad urbana" además de "continuar trabajando para que ningún abulense se quede atrás". A grandes rasgos esas serán las líneas de trabajo.

La Relación de Puestos de Trabajo será también objetivo de esta legislatura,"una RPT que reconozca los derechos y deberes de los trabajadores" y que es vieja conocida de los ciudadanos. "Un compromiso a partir de mañana" para el que pedía "generosidad" de cara a avanzar y a "encontrar el consenso", se trata de "dejar atrás lo que nos separa". En este punto pedía también el trabajo de todos, no sólo "va a corresponder a la corporación municipal, sino que también han de jugar un papel muy importante los representantes de los trabajadores, a quienes hago un llamamiento al diálogo y a tener altura de miras".

En otro orden de cosas, comprometió fidelidad con todas las administraciones pero ya anunció que serán especialmente reivindicativos con la Junta de Castilla y León y con el Estado para que paguen "la deuda histórica que tienen con Ávila".

El desarrollo del Pleno fue sobre guion y por tanto encorsetado, pero hubo momentos para expresar la felicidad especialmente tras la recogida de credenciales por parte de todos los ediles; y también, emotivos, como la parte final del discurso del ya investido alcalde Jesús Manuel Sánchez Cabrera, cuando se dirigió a su familia. A ellos, a los suyos, les pidió perdón por el tiempo robado y les agradeció el apoyo para poder ejercer de nuevo la Alcaldía de la ciudad, "la labor más bonita, ser alcalde de tu ciudad" tal y como reconocía tras el Pleno a los medios de comunicación.

Fue precisamente tras el Pleno cuando los medios tanteamos la opinión de todos los cabezas visibles de los grupos de oposición. Así desde el Partido Popular Alicia García agradecía la mano tendida, aseguró que harán una "oposición responsable, pero también leal, reivindicativa y fiscalizadora" pues ése es el lugar en el que "nos han posicionado los abulenses con su voto" y por tanto la labor que estimaba deben hacer.

Criticó que algunos de los temas que son de nuevo hoja de ruta "llegan tarde" porque ya tenían que estar solucionados. Se refería especialmente a la RPT y al abastecimiento de Las Cogotas con el que recordó "está comprometida la Junta" pero aún no se ha materializado por el cambio de proyecto. Sólo confía en "que se haga durante estos cuatro años".

En cualquier caso, definió el momento de la constitución de la nueva corporación municipal como "muy emocionante para toda la ciudad". "Del lado de las oportunidades que se ofrezcan para Ávila, del progreso y del avance", allí, afirmó es donde se les va a poder encontrar (al PP); como también en contra de cualquier decisión que sea "lesiva para Ávila".

Por su parte Eva Arias, desde el PSOE, destacó la "normalidad" por otra parte esperada con la que "ha transcurrido el acto". Agradeció a la ciudadanía que les votó y se comprometió con todos los abulenses a ejercer una oposición "en consonancia y siempre a favor de esta ciudad durante estos cuatro años próximos, llegando a pactos o a acuerdos siempre a favor de la ciudad y el ciudadano como hemos hecho en todas las legislaturas".

Para José Manuel Serapio, de Vox, sin duda la toma de posesión fue emotiva y destacaba que todo había salido muy bien y avanzó que "lo que queremos para esta legislatura es lo que ya hemos visto hoy aquí, colaboración, acuerdos entre todas las fuerzas políticas" y es que "aquí tenemos que estar para trabajar por los abulenses y por el bien de Ávila".Se comprometió a una "oposición constructiva siempre intentando mejorar la ciudad"."Si es bueno para Ávila es bueno para Vox", finalizó.