El maestro se reta con la alumna

D. A.
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José Mazarías, que dio clase a Clara Martín en EGB, asume la candidatura a la Alcaldía por el PP, que espera integrar en el proyecto a su aún portavoz, Pablo Pérez, pese a negarle repetir

Mazarías acude a saludar a Martín el jueves, en su primer reencuentro tras su designación como candidato. / d. a. - Foto: David Aso

Con José Mazarías (1964) designado desde el pasado martes como candidato del PP a la Alcaldía de Segovia para las elecciones del 28 de mayo, cobra forma un singular duelo con la alcaldesa, Clara Martín (1982), confirmada desde hace meses como cabeza de lista del PSOE y, curiosamente, alumna del todavía delegado territorial de la Junta a mediados de los 90. Simple anécdota de nula trascendencia política, pero curiosa y poco conocida. Entonces él era maestro de EGB en el colegio Domingo de Soto y, aparte de darle clase, compartió con ella un episodio imposible de olvidar para ambos y para muchos otros: un trabajo escolar que derivó en una concentración de más de 5.000 personas junto al Acueducto por la paz y contra ETA, en mayo de 1996.

«Efectivamente, fui profesor suyo hacia el curso 1994/95», confirma Mazarías, aunque repensando, duda si sería 1995/96. A bote pronto puede sonar más fácil que un estudiante recuerde a quien le dio clase y no al revés, si bien Martín, preguntada por El Día, declina pronunciarse o precisar algún dato al respecto. Su ahora adversario político, mientras, no pone reparos y responde que guarda a «muchos alumnos» en su memoria. «Sobre todo a aquellos que a lo largo del tiempo, por una razón u otra, les he seguido viendo, y con Clara he tenido ocasión de coincidir». No poco en este caso, y más que lo harán en adelante.

«Como alumna era discreta, un poco tímida y muy educada», apunta, al tiempo que destaca sobre todo aquel evento de mayo de 1996, inmortalizado en artículos de prensa incluso a nivel nacional. Todo empezó por un trabajo que dirigió el propio Mazarías, titulado 'Diez puntos de vista sobre el terrorismo', durante el cual los alumnos, de 13 y 14 años (séptimo y octavo de la antigua EGB), enviaron cuestionarios a víctimas del terrorismo, agentes de Policía y Guardia Civil, presos de ETA, al entonces presidente del Gobierno, José María Aznar... También al consejero de Interior del Gobierno vasco, Juan María Atutxa, que les anunció que acudiría a Segovia para responder en persona. La decisión «revolucionó» el Domingo de Soto, según la crónica que publicó El País, hasta el punto de que la dirección decidió organizar «una gran concentración por la paz» a la que fueron convocados todos los colegios y estudiantes universitarios segovianos. 

José Mazarías.José Mazarías. - Foto: Rosa Blanco

«La actividad con Atutxa fue muy emocionante, y más en plena época 'del plomo'», cuenta Mazarías, en alusión al término por el que se conocen los años más violentos de ETA. El político vasco cumplió y visitó Segovia el 9 de mayo de 1996, respondió preguntas de los alumnos en el colegio y participó en la concentración junto al Acueducto, bajo el lema 'La paz pide libertad'. Allí se congregaron más de 5.000 personas, escolares en su mayoría, «pidiendo la liberación de Ortega Lara (secuestrado en enero de ese año) con presencia de toda la clase política de entonces, con Ramón Escobar como alcalde y Atutxa presente», relata.

EL CANDIDATO. La pasión profesional de Mazarías ha sido la docencia y a ella le ha dedicado más de 30 años, desde que en 1986 obtuvo una plaza como funcionario de carrera del Cuerpo de Profesores hasta su nombramiento como delegado territorial de la Junta en septiembre de 2019, circunstancia que le llevó a cerrar una etapa de casi dos décadas (desde el curso 1996/97) como profesor de Lengua Castellana y Literatura ya no en el colegio Domingo de Soto, sino en el IES Francisco Giner de los Ríos. Pero también tuvo tiempo de poner en marcha dos empresas que siguen siendo de su propiedad, Publiempresa (agencia de comunicación) y Dorsalia (producción de dorsales), de cuya gestión se apartó precisamente en 2019.

En política lleva más tiempo, aunque fuera a nivel orgánico, sin cargo público. Al PP está afiliado desde 2007, año en el que entró a formar parte del Comité Ejecutivo Provincial del partido, y en 2017 fue designado su coordinador general en Segovia, puesto desde el que dirigió varias campañas electorales.

Clara Martín.Clara Martín. - Foto: Rosa Blanco

En los meses previos a su nombramiento como delegado territorial fue concejal en el Ayuntamiento de Trescasas, tras concurrir como cabeza de lista por ese municipio (y perder frente al PSOE) en las elecciones de mayo de 2019; las mismas que supusieron el inicio de la trayectoria de Clara Martín en el Ayuntamiento de Segovia, primero como concejala y, desde junio de 2022, como alcaldesa. 

«Hoy estoy en la Delegación Territorial porque el partido y el presidente quisieron que diera un paso adelante, pero también he estado trabajando mucho tiempo detrás por el partido, igual que si me quiere en otro sitio o tengo que volver a mi instituto, allí estaré», respondía Mazarías a este periódico, durante una entrevista concedida a finales de noviembre, al preguntarle sobre su posible candidatura, que ya sonaba con fuerza. No en vano, ya en 2019 el PP provincial apostó por él para la Alcaldía de Segovia, aunque a última hora improvisó designar a José Luis Sanz Merino en busca de consenso a nivel regional y sobre todo nacional. Pero igualmente acabó desautorizado desde Génova, entonces con Pablo Casado al frente, que impuso a Pablo Pérez durante la misma mañana del acto de presentación de candidatos, al que llegó a acudir como tal quien había sido designado en principio.

EL DAMNIFICADO. Pérez aún apuraba sus opciones de repetir como candidato hasta hace apenas unos días. Él mismo no dejó de admitir sus aspiraciones cada vez que le preguntó la prensa en los últimos meses, pero la presidenta provincial del PP ya amagaba con dar por hecho el martes que será parte del nuevo proyecto municipal, aunque está por verse que sea como concejal, a lo cual no ha respondido. El propio Pérez estuvo en la sala de prensa pero fuera de focos, y en un silencio que no rompió ni a preguntas de periodistas tras la rueda de presentación del candidato. Pero el jueves, preguntado por El Día, lanzaba un mensaje de unidad:«Claro que me hacía ilusión seguir, pero una vez que el partido ha tomado una decisión, debemos apoyarla. Mazarías es una persona seria que merece todo el apoyo, y el mío el primero», señaló. 

Sanz también decía el martes que esta vez no habrá «sorpresas» de última hora con la designación; y obviamente, tampoco hay interés en su partido por dar pie a declaraciones que evidencien una división como la que se retrató con absoluta claridad, sobre todo, en los meses previos y en los posteriores a las municipales de 2019.

Desde la entrada de Feijóo como sucesor de Casado, los populares vienen subrayando que ahora los candidatos se designan «de abajo a arriba», criterio que, en caso de aplicarse realmente, y no habiéndose producido cambios en la dirección provincial del partido en estos últimos años, ya llevaba a pensar de antemano que el elegido sería Mazarías. Pero aun así, Paloma Sanz, que fue quien lo nombró coordinador general del PP segoviano cuando accedió a la presidencia provincial en 2017, repartía este martes responsabilidades con Valladolid y Madrid, a la vez que también atribuía la decisión a encuestas internas: «El partido lo que quiere es ganar las elecciones. El partido ha sondeado al electorado y el presidente regional y el nacional, con los sondeos que se han hecho en Segovia, han considerado oportuno contar con las dos personas que están, con Pablo Pérez y con José Mazarías. Pablo Pérez es el futuro de nuestro partido, con lo cual es una persona muy importante para todos nosotros. Una persona de la cual no podemos prescindir en el momento actual, le necesitamos. El Partido Popular lo necesita. Algunos vamos cumpliendo años y otros tienen que ponerse al frente del partido». Pero no será ahora.

MENSAJE DE "MODERACIÓN". Respecto a Mazarías: «Quiero destacar que su designación refuerza la alternativa solvente, ilusionante y moderada del Partido Popular en Segovia», añadía Sanz. Justo las mismas palabras que pronunciaba Feijóo el día anterior en la rueda de prensa que ofreció para anunciar la vuelta al partido, en este caso como portavoz de campaña, del exdirigente vasco Borja Sémper, al que el líder gallego describió como «una alternativa solvente, ilusionante y moderada». Es decir, el mensaje de moderación que pretenden trasladar ahora los populares a nivel nacional por la imagen que proyecta Sémper, en versión adaptada al nivel local. 

Mazarías, por su parte, liberaba el martes la satisfacción que hasta entonces había contenido con el frío tópico 'a disposición del partido': «No creo que haya mayor honor para un segoviano nacido en San Marcos y criado en El Carmen que optar a la Alcaldía de su ciudad, y si además lo haces respaldado por un partido como el Partido Popular, no cabe duda de que el honor es doble». 

Tampoco desaprovechó su primera comparecencia como candidato para presentar como un aval los 40 meses de delegado territorial que cumplía ese mismo día y atribuirse «frutos» de esa labor, anticipándose así al discurso con el que va a chocar una y otra vez con la izquierda, desde donde se va a describir como defecto y utilizar como reproche la labor que Mazarías defiende como virtud.

Mazarías citó así «la puesta en marcha de la radioterapia a comienzos de 2021, la del hospital de día de Salud Mental en octubre de 2022, el inicio de las obras del centro de FP de San Lorenzo, las del centro de salud Segovia IV, las de la Residencia Mixta y muy pronto las de la Residencia Asistida; los pasos dados para que la Facultad de Enfermería sea realidad próximamente, o el proyecto de ampliación del hospital», además de «algunas infraestructuras de obra civil como la renovación de la CL-601, la carretera de Arévalo, y tantos otros proyectos que hacen que los desvelos valgan la pena».

PRIMERAS CRÍTICAS. Para el PSOE, mientras, Mazarías «es el representante directo de los incumplimientos y agravios de la Junta a Segovia», decía el miércoles su portavoz en el Ayuntamiento, Miguel Merino, el único del grupo municipal que se ha manifestado esta semana, tras negarse la alcaldesa el jueves a hacer declaraciones porque, según sus propias palabras: «Estoy para gobernar y no para hacer una opinión particular de cada candidato». Merino sí se explayó con una rueda de prensa convocada de propio para ello: «Ni el centro de salud Segovia IV ni el instituto de San Lorenzo se han levantado por el impulso de Mazarías, llevaban más de 14 años. Ni la Radioterapia, que no hay que olvidar que es privada (por concierto de Sacyl con Recoletas) porque no han sido capaces de hacer un hospital en condiciones; ni la ampliación del hospital, que ha contado con el apoyo del Ayuntamiento desde los inicios de la idea». En la misma línea se expresaba el portavoz de IU, Ángel Galindo, que invocó «el abandono de la Junta a Segovia» encarnado en Mazarías, mientras la portavoz de Cs, Noemí Otero, saludaba su llegada en positivo, aun siendo consciente de que así alimentaba rumores o especulaciones sobre su posible incorporación a la lista del PP.

Las 'lecciones' de unos a otros se sucederán en estos meses, en cualquier caso, pero las notas a Martín y Mazarías, como al resto de candidatos, se las pondrán los ciudadanos en mayo.