Las principales empresas segovianas ya buscan fondos UE

David Aso
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Verescence, Ontex, Drylock, Innoporc, Copese, Dibaq, Huercasa, Octaviano Palomo, Beam Suntory, Taiger, Pigchamp... La mayoría de ellas ya está tomando posiciones para intentar captar ayudas con las que costear planes de ampliación o modernización

La pandemia ha dejado en el aire el calendario de inversiones de Verescence en La Granja pero, si obtiene ayudas europeas, ve posible superar los 500 empleados en plantilla en los próximos años.

Verescence, Ontex, Drylock, Innoporc, Comercial Pecuaria Segoviana (Copese), Dibaq, Octaviano Palomo, Huercasa, Ambientair, Beam Suntory, Pigchamp, Taiger… Las principales empresas de la provincia se preparan para intentar captar fondos del plan europeo de recuperación (Next Generation EU) que les permitan financiar nuevos proyectos de ampliación o modernización de sus líneas de negocio e instalaciones. La mayoría de las citadas ha materializado su interés con la presentación de propuestas concretas ante el Gobierno, mientras otras estudian posibilidades, a la expectativa de conocer las bases de las convocatorias una vez se definan con previsión de ir lanzándolas a partir de mediados de año. 

El Día ha contactado con estas compañías y cada cual anticipa más o menos detalles de su estrategia en función de sus posibilidades, limitadas en algunos casos por el compromiso de confidencialidad que conlleva haberse integrado en iniciativas conjuntas con otras empresas de este y otros territorios, dado que lo que se está presentando ahora al Gobierno (a través de los ministerios que lanzaron las llamadas manifestaciones de interés, una especie de tormentas organizadas de ideas) son fundamentalmente, salvo excepciones, propuestas de grandes proyectos tractores impulsados por grandes multinacionales, agrupaciones de empresas o consorcios capaces de atraer e integrar a buena parte de sus sectores o cadenas de valor.

No obstante, ni son las compañías segovianas citadas todas las que están implicadas en la provincia, ni están implicadas aún todas las que pueden terminar resultando beneficiarias de estos fondos que, en total, pueden alcanzar los 140.000 millones de euros para España (entre préstamos y subvenciones directas de cofinanciación) si su tejido económico público y privado es capaz de generar suficientes proyectos para ello. De hecho, participar en esta fase preliminar no garantiza el acceso a ayudas, sino que después tocará concurrir a convocatorias formales donde también tendrán cabida las que aún no han tomado partido en esta fase. Sin embargo, las que ya han dado un paso al frente cuentan con la ventaja de posicionarse desde el inicio del proceso para tener así opciones de influir en la definición de las bases de tales convocatorias para tener un mejor encaje, dado que la idea del Gobierno es ajustarlas a los intereses que hayan manifestado las propias empresas con la presentación de grandes proyectos estratégicos.

Ontex ha presentado ante Industria un proyecto por libre, sin alianzas con otras empresas, con posibles inversiones para modernizar su planta de Valverde y aumentar su eficiencia energética.Ontex ha presentado ante Industria un proyecto por libre, sin alianzas con otras empresas, con posibles inversiones para modernizar su planta de Valverde y aumentar su eficiencia energética.


VERESCENCE. Más robots en las líneas, pero también más empleo con ampliaciones de producción.

Verescence aspira a obtener cofinanciación para acelerar la implementación de proyectos de robotización en distintas áreas de su factoría granjeña, pero también pretende ganar capacidad productiva, de tal modo que los puestos de trabajo que pudiera perder con la automatización los podría recuperar con unas mayores cadencias potenciales de fabricación en líneas donde trabaja casi al límite de sus posibilidades. Actualmente ya es la primera empresa de Segovia en volumen de plantilla con más de 400 empleos directos y según su director técnico, Javier Hernández, si salieran adelante los planes en ciernes «fácilmente» terminarían superando el medio millar.

De momento, lo que sí puede confirmar es que ya son parte activa en la fase preliminar de gestación de las convocatorias de ayudas europeas después de haberse integrado recientemente en «un proyecto tractor o PERTE». Con ese acrónimo, aún poco conocido pero que apunta a popularizarse a partir de este año, se alude a los llamados Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica, una nueva figura administrativa de colaboración público privada ideada por el Gobierno en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de España, documento que a su vez se ha concebido como la hoja de ruta nacional hacia la financiación con subvenciones y préstamos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia Europeo (el ya citado Next Generation EU).

Drylock cuenta con terminar las obras de ampliación de la fábrica en primavera y, si recibe el apoyo de la UE, cree que se asegurará alcanzar la velocidad de crecimiento prevista, por lo que seguiría aumentando plantilla.Drylock cuenta con terminar las obras de ampliación de la fábrica en primavera y, si recibe el apoyo de la UE, cree que se asegurará alcanzar la velocidad de crecimiento prevista, por lo que seguiría aumentando plantilla. - Foto: Rosa Blanco

Como resume el director técnico de Verescence, esta figura está orientada a que grandes empresas o ‘cluster’ (conglomerados de varias organizadas en consorcios, principalmente) presenten grandes proyectos que en principio deben sumar un montante mínimo de 40 millones de euros, de acuerdo con las condiciones iniciales fijadas por el Ministerio de Industria. «Nosotros puede que estemos considerados como una empresa grande, pero no tanto como para llegar a esos volúmenes si no es a través de ‘clusters’ que reunifiquen proyectos de distintas empresas para su presentación de manera conjunta», y así lo han hecho.

En su caso se han integrado concretamente en AFM Cluster, un conglomerado de fabricantes industriales que ha presentado ante el Ministerio de Industria un macroproyecto llamado e-Machine Digital Factory y basado sobre todo en industria 4.0 de robotización de fábricas. «Y nosotros, dentro de ese proyecto, hemos presentado cuatro distintos», apunta Hernández. Se trata de iniciativas de inversión que ya tenían previstas pero que podrán implementarse a mayor o menor ritmo según el impulso externo que obtenga la empresa, dado que además ya se está viendo en la tesitura de encarar «fuertes recortes dentro del plan de negocio» como consecuencia de la crisis desatada por la pandemia.

El primer proyecto planteado por Verescence, con un coste estimado de 550.000 euros, se centra en adquirir y poner en línea seis robots para avanzar en la automatización del proceso de manipulación y ensamblado de aisladores eléctricos. Otro mucho más pequeño (60.000 euros), aunque todo suma, apuesta por automatizar la entrada de componentes a la línea de siliconado de aisladores (se aplica una capa de silicona a estos aparatos para mejorar su resistencia en condiciones atmosféricas complicadas). A través de un tercer proyecto (de 230.000 euros) cuenta con automatizar la entrada de los frascos a varias líneas de decorado. Y con el cuarto (de 261.000) prevé elevar la automatización y monitorización de las líneas de producción del área más emblemática de la fábrica, la de vidrio.

El Grupo Copese ya inauguró en 2020 una fábrica de piensos que recibió casi un millón de la UE y se ha integrado en dos ‘proyectos tractores’ con otras empresas para optar a los nuevos fondos.El Grupo Copese ya inauguró en 2020 una fábrica de piensos que recibió casi un millón de la UE y se ha integrado en dos ‘proyectos tractores’ con otras empresas para optar a los nuevos fondos.

«Esos son los proyectos que queremos sacar adelante este año», incide el director técnico de Verescence La Granja, y por eso son los primeros que han planteado, «pero dependiendo de cómo avance el PERTE y hacia dónde se dirijan las ayudas, hay otras alternativas que en realidad pueden acabar siendo las que finalmente tengan más cabida», subraya. Ahí es donde entra la iniciativa de aumentar su capacidad productiva en la línea de ensamblado de aisladores eléctricos con una inversión estimada en 350.000 euros, objetivo ahora también parado por la crisis a la espera de captar apoyo externo y que permitiría seguir aumentando plantilla. «Aunque avancemos en la automatización, muchos procesos como los de controles de calidad o supervisión de cambios van a seguir siendo manuales, y si sacamos adelante esta ampliación podríamos crear ocho o diez empleos», valora. En una situación similar se encuentra la ampliación de la capacidad productiva del área de decorado, donde se pretende incorporar una segunda línea de lacado de frascos que requeriría una inversión importante, en torno a 1,5 millones, pero que generaría a su vez «en torno a veinte empleos directos y cinco indirectos», acercándose a la cifra de 500 empleados que se ve factible superar cuando se implementen todos los proyectos pretendidos.

 

ONTEX. Un proyecto para ganar competitividad y afianzar su apuesta por Segovia

Innoporc tiene planes de modernización de granjas y generación de renovables por los que se ha aliado con empresas y entidades como Indra, Vodafone, Redexis Gas o el Instituto Tecnológico Agrario.Innoporc tiene planes de modernización de granjas y generación de renovables por los que se ha aliado con empresas y entidades como Indra, Vodafone, Redexis Gas o el Instituto Tecnológico Agrario.

La multinacional de pañales y otros productos de higiene íntima Ontex, por su parte, ha decidido concurrir a la manifestación de interés que lanzó el Ministerio de Industria con la presentación de una propuesta de inversiones en su fábrica segoviana que de inicio no se integra en ningún proyecto tractor o PERTE compartido con otras empresas, sino que va por libre, aunque sí podría ajustarse a diversos ejes estratégicos marcados por el plan de resiliencia para poder optar a ayudas.

«Habrá que ver el encaje que podemos tener porque los PERTE no dejan de ser supracomunitarios con un volumen mínimo de 40 millones de euros y no llegamos a esa cantidad, pero de momento nosotros hemos manifestado nuestro interés para que conozcan nuestros proyectos», explica el director de la factoría segoviana, José Ignacio Luengo. 

Ontex no va a ciegas en ese sentido, dado que ha mantenido contactos previos con la Administración autonómica y la central antes de formalizar la presentación: «No sabemos cómo va a evolucionar todo esto (el proceso preparatorio de las convocatorias de ayudas), no se tiene aún toda la información y tampoco sabemos si se cubrirá todo el cupo de proyectos, o incluso si terminarán relajando la parte de los 40 millones (de presupuesto mínimo para cada proyecto planteado en esta fase previa a las convocatorias)», advierte Luengo. «Pero queríamos dejar patente que tenemos proyectos para Segovia, es bueno que los conozcan tanto en Industria como en la Junta de Castilla y León, y luego ya se irá avanzando», argumenta.

Dibaq cuenta con tantear la captación de fondos europeos a través de Dibaq cuenta con tantear la captación de fondos europeos a través de "varios" proyectos que ya ha preparado su grupo.

«Las ideas que tenemos van orientadas hacia la transformación y mejora de la competitividad tocando los puntos de modernización productiva, sostenibilidad, eficiencia energética, posicionamiento de Segovia dentro de la red europea de Ontex… Esto quiere decir procesos de automatización, digitalización, innovación y aumento de capacidad. ¿A qué llegaremos finalmente? Habrá que ver», señala. 

Luengo incide en «palabras clave» del proyecto de Ontex para Segovia coincidentes con las líneas generales que esbozan los criterios generales de concesión de las ayudas a la recuperación: «Mejora de la competitividad, porque al final la mejoraríamos aumentando la productividad modernizando instalaciones. Y en el contexto en el que nos situamos también está la parte de sostenibilidad, reducción de residuos, aumento de la eficiencia energética… Son claves porque sin estas cuestiones no habría acceso a ayudas, y evidentemente la parte de automatización y digitalización tiene un peso importante en los proyectos». Además, una baza a favor de las opciones de Ontex, cuya plantilla ronda los 350 empleados, está en el hecho de estar radicada en un municipio de apenas un millar de habitantes, Valverde del Majano, dentro de un territorio especialmente castigado por la sangría de la despoblación y el envejecimiento, cuando un eje fundamental de las ayudas está en la cohesión territorial y la revitalización del medio rural.

 

Miguel Antona, director general de Innoporc: «Si no conseguimos que estos fondos europeos se traduzcan en la generación de nuevos proyectos para Segovia como los que exige el siglo XXI, sostenibles e innovadores, desde luego será un fracaso».Miguel Antona, director general de Innoporc: «Si no conseguimos que estos fondos europeos se traduzcan en la generación de nuevos proyectos para Segovia como los que exige el siglo XXI, sostenibles e innovadores, desde luego será un fracaso».

DRYLOCK. Dispuesta a acelerar desde la sostenibilidad su plan de ampliación de la fábrica

Entre las empresas segovianas que se están posicionando destaca también el caso de la otra multinacional de pañales y otros productos de higiene íntima radicada en la provincia, Drylock, con fábrica en el polígono de Hontoria, al haber asumido el rol de «empresa capaz de generar un proyecto tractor» por sí misma e integrar en él a otras compañías. Con esta iniciativa aspira a recibir impulso público para llevar a cabo «algunos de los proyectos que permitirán alcanzar la velocidad de crecimiento prevista», basándose para ello «en una clara apuesta por la sostenibilidad y la transición ecológica». Dos valores sobre los que asienta sus previsiones de poner en marcha líneas de empaquetado de pañales infantiles en bolsas de papel, erigiéndose así en «la primera del sector» en sustituir el plástico por este «nuevo envase biosostenible».

La factoría segoviana de Drylock cuenta con empaquetar en papel «al menos» un 30% de los 750 millones de pañales que prevé fabricar a lo largo de 2021, «lo que supondrá retirar del mercado 12 millones de bolsas de plástico», pero el objetivo es llegar al 100% de los pañales infantiles en 2022. Y en esa iniciativa de innovación mediante el uso de envases y embalajes sostenibles asienta en buena medida el proyecto con el que espera atraer ayuda externa para su plan de ampliación, que supondrá duplicar sus instalaciones actuales (de 12.000 a 22.000 metros cuadrados) con nuevas líneas de producción, entre las cuales está la de packaging. Las obras en realidad ya se iniciaron a finales de 2020 y se esperan terminar en torno a marzo, pero el plan seguirá requiriendo inversiones complementarias para alcanzar el volumen de crecimiento deseado a medio plazo, con una plantilla que pasará de los 150 trabajadores actuales, aproximadamente, a más de 250.

Miguel Ángel González, director de la factoría segoviana de Drylock: «Segovia, teniendo en cuenta su tejido empresarial y los objetivos que se exigirán desde Europa, tiene sus posibilidades muy reducidas».Miguel Ángel González, director de la factoría segoviana de Drylock: «Segovia, teniendo en cuenta su tejido empresarial y los objetivos que se exigirán desde Europa, tiene sus posibilidades muy reducidas». - Foto: Rosa Blanco

 

INNOPORC. Más tecnología para las granjas, digitalización y cero emisiones contaminantes

Mientras, desde el sector agrario, las empresas de producción porcina de Innoporc se han integrado hasta en cuatro consorcios (dos de ellos promovidos por el propio grupo segoviano) con proyectos tractores de más de 40 millones de euros cada uno para buscar impulso a inversiones que, en el caso concreto de Innoporc, podrían superar los ocho millones en total. Mejoras diversas con las que aspira a avanzar en la modernización y digitalización de instalaciones y procesos, así como en el desarrollo sostenible mediante la reducción de la contaminación a cero y el aprovechamiento de residuos para la generación de energías renovables.

Carlos Piñeiro, CEO de Pigchamp: «La transformación digital ya estaba en marcha, pero esta situación tan terrible lo que puede hacer es ayudar a que vaya más rápido y se haga de manera más estructurada con los fondos que pueden llegar».Carlos Piñeiro, CEO de Pigchamp: «La transformación digital ya estaba en marcha, pero esta situación tan terrible lo que puede hacer es ayudar a que vaya más rápido y se haga de manera más estructurada con los fondos que pueden llegar». - Foto: Rosa Blanco

Con uno de los proyectos, valorado en algo más de un millón, persigue concretamente «la huella ambiental cero» al apostar por que sus granjas «sean neutras en cuanto a todo tipo de emisiones contaminantes, no sólo por metano, sino también por nitratos, nitritos, purines…», describe su director general, Miguel Antona. «Todo ello en el marco de una serie de sinergias con las cuales se busca ser mucho más eficiente en los procesos dentro de las granjas, con un control tecnológico muy importante en base a mejoras de sensores y automatización sin perder la parte humana, pero que ésta sea de más calidad y requiera menor manejo físico». Entre los participantes destaca el Instituto Tecnológico de Castilla y León.

La segunda iniciativa, relacionada en cierta medida con la anterior, contempla inversiones de Innoporc por valor de «seis o siete millones» al incluir la parte relativa a la generación de energía limpia con plantas de biogas en alianza con Redexis. 

Respecto a los dos proyectos tractores que Innoporc no promueve, pero ha aceptado la invitación a participar, en uno está la Universidad de Burgos y va «enfocado hacia el reaprovechamiento del agua y la disminución de la huella hídrica», explica Antona; y el otro está liderado por Vodafone, con Indra-Minsait como socio tecnológico y la implicación de Air Institute y la Universidad de Salamanca como proveedores de conocimiento y centro de investigación, además de empresas de fotovoltaica y eólica o firmas agro como Central Lechera Asturiana, aparte de otras más pequeñas. 

El objetivo de esta última propuesta es desarrollar una plataforma de sensorización y análisis de datos e Innoporc aporta trabajo, entre otras cuestiones, para el codiseño de la propia plataforma, la implantación y recogida de datos, sensórica de cultivos, bienestar animal y mediciones de estrés, análisis del sentimiento del consumidor, realidad aumentada o trazabilidad.

Antona confía en obtener apoyo económico externo para sacar adelante estas inversiones pero, en cualquier caso, la intención de Innoporc, que da trabajo directo a 94 personas, es avanzar en su estrategia de modernización de instalaciones, digitalización de procesos, contaminación cero y generación de renovables con o sin ayudas europeas.

 

COPESE, HUERCASA, OCTAVIANO PALOMO Y DIBAQ. Iniciativas lanzadas desde la discreción.

Otro grupo agrario, Copese, en este caso de producción y comercialización de productos cárnicos de cerdo, se ha integrado en dos proyectos presentados a las manifestaciones de interés lanzadas por el Gobierno y sus objetivos, en esencia, salvando ciertas distancias no difieren demasiado de los que persigue Innoporc, a juzgar por los respectivos títulos: ‘Gas renovable para una economía circular en el sector agroindustrial’ y ‘De la Granja a la Mesa: Retos y Oportunidades del Sector Agrícola’. Fuentes autorizadas de este grupo indican que para conocer más detalles de ambos proyectos tocará esperar a que se pronuncien los respectivos consorcios de manera conjunta. 

Copese, en cualquier caso, ya tiene experiencia en la captación de fondos de la UE. De hecho, el pasado verano confirmaba la construcción de una nueva planta para la producción de piensos con casi un millón de euros procedentes de Bruselas; concretamente, de la línea de apoyo a inversiones en transformación/comercialización y/o desarrollo de productos agrícolas del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader).

Huercasa también está en un momento del proceso parecido al de Copese. Se ha integrado en un proyecto tractor denominado 'Ebro Food Valley' y liderado por el Centro Nacional de Tecnología y Seguridad Alimentaria (CNTA) con una docena de empresas agroalimentarias implicadas. El objetivo común se centra en "la modernización y transformación digital y sostenible del sector en España" y los proyectos concretos de la compañía con sede en Sanchonuño están por conocerse.

Octaviano Palomo, centrada en la comercialización y distribución de cereales, fertilizantes y materias primas para la industria agroalimentaria, también se ha integrado en dos macroproyectos. Su presidente, Pedro Palomo, declina dar detalles todavía por preservar la confidencialidad de otras empresas con las que se ha aliado por tales iniciativas pero, en cualquier caso, confía en que las ayudas lleguen al tejido empresarial segoviano. «Cuánto llegará realmente es la duda, en todo caso», matiza.

En Dibaq comparten dudas parecidas sobre las cantidades que puedan llegar, dado que tanto el reglamento como las bases están aún por definirse, pero no por ello ha dejado de posicionarse esta empresa segoviana de nutrición animal. Cuenta con participar en «diferentes proyectos» que se han preparado «tanto en el caso de Dibaq Group como en el de Derwent Group». Serían por tanto «varias» las iniciativas en las que trabajan ajustadas a «los ejes principales de los fondos», pero de nuevo en este caso toca esperar antes de conocer los detalles.

 

De las dudas de Beam Suntory al encaje esperado por las tecnológicas Pigchamp y Taiger

De las principales empresas segovianas consultadas por El Día, quizá sea la de DYC, Beam Suntory, la que deje todo más abierto sobre la opción de captar fondos. «Nuestro plan de inversiones a tres años será definido en los próximos meses y veremos las ventajas para la compañía segoviana de utilizarlos», apuntan fuentes de esta firma que, sin embargo, matizan que «normalmente» sus inversiones «se financian con capital propio».

Pigchamp, pionera en la digitalización del sector porcino, experta en big data, se mantiene atenta pero en un segundo plano. «Estamos pendientes como todos por muchas razones», destaca su CEO, Carlos Piñeiro. «Nuestras opciones no son individuales, sino que estamos pendientes de integrarnos dentro de actuaciones coordinadas del sector a través de las asociaciones, tanto de Interporc (Interprofesional del Cerdo de Capa Blanca Español) como de Anprogapor (Asociación Nacional de Productores de Ganado Porcino)», sin descartar tampoco otras alternativas. Su idea, en esencia, pasa por «seguir trabajando en la eficiencia, calidad y transparencia que ofrecen los procesos de transformación digital y ponerlos rápidamente a disposición del sector», resume. «Esta necesidad ya estaba y esta situación de crisis tan terrible lo que puede hacer es ayudar a que esto pase antes y además pase mejor, haciéndolo de una manera estructurada, ordenada y pensada para poder garantizar que los recursos que van a llegar se usen de la mejor manera posible, atendiendo a algunas de las necesidades más importantes del sector».

Otra empresa de perfil tecnológico, Taiger, cuenta con la baza de estar especializada en una actividad clave para la nueva economía como es la aplicación de la inteligencia artificial al sector financiero, el legal, los seguros y la Administración pública. «Nuestra actividad puede encajar perfectamente y estamos en la fase de ver qué proyectos podrían resultar más interesantes», señalan desde esta compañía que abrió su centro en Segovia a finales de 2019. «Aún no hay nada decidido, pero sí sabemos con certeza que nos gustaría participar en la línea de optimización de procesos».

Por otra parte, como ya avanzaba El Día en su edición del pasado 2 de enero, la Real Fábrica de Cristales de La Granja está ajustando su plan de modernización a las pautas marcadas por la UE y el Gobierno central y aspira a recibir ayudas para emprender nuevos proyectos como la digitalización de sus fondos de moldes antiguos, unos 5.000, que serían accesibles desde una biblioteca virtual que permitiría verlos en 360 grados o incluso imprimirlos en 3D. 

A nivel público, la Diputación de Segovia también ha tomado posiciones con propuestas como «la incorporación de cultivos alternativos generadores de productos primarios de proximidad, como la trufa, la lavanda y otras especies de interés, con el fin de ser integrados en la industria agroalimentaria y que tengan capacidad de comercialización a nivel europeo». Y el Ayuntamiento de Segovia también prevé participar, aunque no ha desvelado todavía cómo.

El interés es por tanto evidente a todos los niveles, público y privado. La Cámara de Comercio y la Federación Empresarial Segoviana (FES) siguen atendiendo y orientando a empresas dispuestas a optar a estos fondos, aunque las dudas sobre cómo hacerlo no cesarán hasta que el Gobierno termine de definir bases y convocatorias y empiece a verse hasta qué punto las buenas expectativas se traducen en realidades que aceleren la revitalización del tejido económico segoviano.